“Ir todos los meses al ortodoncista para las revisiones periódicas de tus alineadores invisibles es un inconveniente para muchas personas. A la pérdida de tiempo entre desplazamientos y salas de espera hay que sumarle que no es un tratamiento barato”. Así reza un anuncio por internet de una empresa que promete la sonrisa perfecta sin pasar por la consulta del ortodoncista. En la web recalca varias veces que se pauta el tratamiento a distancia. Es una propuesta que la Sociedad Española de Ortodoncia y Ortopedia Dentofacial (SEDO), presidida por el gallego Juan Carlos Pérez Varela, critica tildándola de “barbaridad”.

El experto reconoce que el auge de los alineadores transparentes “ha hecho que haya empresas que los vendan directamente al paciente, incluso online, lo que puede acarrear problemas y un tratamiento inadecuado, tanto en la mordida como funcionalmente”.

Por ello, recalca que estos alineadores son un “tratamiento sanitario” y que los integrantes de la Sociedad que preside se encuentran “preocupados por el aumento de empresas que publicitan y comercializan online alineadores dentales utilizando métodos que consideramos poco ortodoxos y que perjudican la salud bucodental”.

Alineador transparente. FdV

El problema es grave, según su punto de vista, porque venden la obtención de una sonrisa bonita a menor precio. “La ortodoncia no puede tomarse como una moda; es una disciplina sanitaria que debe ser dianosticada, planificada y supervisada por profesional cualificado”, subraya.

Para que se entienda mejor, explica que se trata de crear férulas extraíbles de plástico transparente fabricadas “a medida para cada paciente” por lo que se precisa un estudio pormenorizado de la boca, la posición de los dientes así como de la mordida y otras consideraciones tras exploraciones bucales, radiografías del cráneo incluidas.

“Es importante, añaden desde la SEDO, que la colocación de las férulas se realicen el gabinete dental y que el profesional compruebe de forma progresiva lo programado” para analizar si se está llevando a cabo lo previsto para cada fase del tratamiento.

Asimismo, resaltan que los tratamientos de ortodoncia pueden surgir “complicaciones” como irritaciones de tejidos blandos, llagas, molestias puntuales en algún diente, así como roces en bucosas o tejidos blandos por lo que “se requiere seguimiento presencial” con atención “a la aparición de lesiones de tipo traumático”.