Un comité de emergencia formado por expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) celebró ayer una reunión a puerta cerrada para debatir si se declara una emergencia internacional por el brote de viruela del mono, con unos 14.000 casos declarados ya en más de 70 países en los últimos cuatro meses. Del total de casos, más de 10.600 fueron detectados en Europa. A la hora de cerrar esta edición no se había comunicado ninguna decisión.
Es la segunda vez que se reúne este comité después de haber estimado esa emergencia internacional en junio, aunque dado el aumento de casos en distintas regiones del planeta se optó por analizar nuevamente esa opción, que aumentaría los niveles de alerta de las redes sanitarias nacionales.
“Sigo preocupado por el alto número de casos, en un número cada vez mayor de países”, indicó en la apertura del comité el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus. Añadió que por ahora la mayor parte de los casos se han producido entre hombres que tienen sexo con otros hombres, y alertó sobre la estigmatización que podría sufrir el colectivo debido a esta circunstancia.
Una emergencia internacional se puede declarar cuando una enfermedad contagiosa se expande en muchos países de forma descontrolada, y con ello se requiere a los gobiernos a adoptar medidas preventivas especiales para frenar su expansión. En 2020 la OMS declaró tal emergencia, aún en vigor, debido al COVID, y también ha dictado esta medida en años recientes para varios brotes de ébola.
En Europa ya se han detectado más de 10.600 casos de viruela del mono en 36 países, según el último informe publicado por el Centro Europeo para el Control y la Prevención de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés) y la región europea de la OMS.
La fecha más temprana de aparición de los síntomas fue el 3 de abril de 2022. La mayoría de los casos tenían entre 31 y 40 años (42%) y hombres (99,5%). Se hospitalizaron 256 casos (8,1%), de los cuales 114 casos requirieron atención clínica. Un caso ingresó en la UCI y no se reportaron casos de muerte.
Bebé infectado
El consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, explicó ayer que tanto el bebé de 7 meses infectado con viruela del mono o viruela símica como sus padres presentan una buena evolución clínica y ha abogado por seguir incrementando la vacunación, tanto de contactos directos como de grupos de riesgo.
El máximo responsable de la Sanidad madrileña explicó que se trata de un contagio fruto de la actividad diaria con sus padres, ambos infectados por ‘monkeypox’, y es un caso aislado y puntual.
Tanto el bebé como sus progenitores estaban vacunados y el menor se mantiene en aislamiento en su domicilio.
