Bernardino Graña en la categoría de Letras; Antón Pulido Novoa, en Artes Visuais; Nova Galega de Danza, en Artes Escénicas; Natalia Lamas Vázquez, en Música; Zaza Ceballos, en Audiovisual; el programa de la TVG “Dígocho eu!”, en Lingua; el monasterio ourensano de San Pedro de Rocas, en Patrimonio Cultural; y la Federación de Asociaciones Gallegas República Argentina, en Proxección Exterior, fueron los galardonados de los Premios da Cultura Galega 2021, cuya gala se celebró ayer en el Centro Galego de Arte Contemporáneo (CGAC) de Santiago.

Entre los asistentes estuvo el presidente de la Xunta de Galicia en funciones, Alberto Núñez Feijóo; el conselleiro de Cultura, Román Rodríguez, y el presidente del Parlamento de Galicia, Miguel Ángel Santalices, que entregaron además algunos de los galardones.

“Lleváis por el mundo nuestro nombre y enriquecéis nuestra huella colectiva”, afirmó Feijóo

Alberto Núñez Feijóo - Presidente de la Xunta en funciones

En su intervención, Núñez Feijóo agradeció “sinceramente” su esfuerzo al sector de la cultura, “que dio lo mejor de sí en los momentos más complejos”, subrayó en el que fue su último acto como presidente de la Xunta de Galicia.

El presidente celebró la “reactivación cultural de Galicia” tras la pandemia y apeló a su consolidación en este 2022, “con el impulso del Xacobeo y los fondos europeos”. “Lleváis por el mundo nuestro nombre y enriquecéis nuestra huella colectiva”, señaló respecto al papel de los creadores y añadió: “La cultura suele presentarse como una continuidad histórica que nos permite adaptar en cada momento lo mejor de la tradición sin menoscabar su esencia, garantizando su supervivencia en el futuro”.

Otros galardonados fueron Bernardino Graña, Natalia Lamas y el programa “Dígocho eu!”

En cuanto a los galardonados, subrayó el compromiso con el idioma de Bernardino Graña y Esther Estévez; la promoción, difusión y proyección internacional de la cultura de la Federación de Asociaciones Gallegas de la República Argentina, de Antón Pulido, de Natalia Lamas y de la Nova Galega de Danza; el compromiso con la igualdad de Zaza Ceballos y la labor en la conservación del patrimonio del monasterio de San Pedro de Rocas.

“Galicia practica una cultura extrovertida que está en permanente diálogo con las culturas española, europea y americana, abierta a todas las influencias y sin temor a quedar diluida. Es el vehículo por el que Galicia tiene una presencia notable en el mundo global”, afirmó.