Al final ha resultado que no estaban solos en la galaxia. La banda insignia de la Movida viguesa selló ayer el primer acto de su despedida y lo hizo frente a más de 10.000 espectadores en un Wizink Center abarrotado, que empezaron a vibrar cuando Siniestro Total inició el concierto con “Tan hermoso”.

El lugar escogido para la despedida fue a más de quinientos kilómetros de su terra galega. Contra la voluntad de miles de vigueses que los han venido siguiendo desde los ochenta hasta hoy, la banda liderada por Julián Hernández eligió decir adiós por todo lo alto en Madrid. El éxito de la venta de entradas del concierto fue insólito para la banda.

Julián Hernández, líder de Siniestro Total, ayer en el Wizink Center // M.O.

En apenas una semana tras el anuncio de la despedida, Siniestro Total había vendido todas las localidades, algo que les llevó a programar una segunda fecha que tendrá lugar esta noche a las 21.30 horas. Y es que incluso algunos vigueses se han negado a resignarse y faltar a la histórica cita.

Pablo Vázquez, periodista cultural de A Movida en el área de Vigo, coge el teléfono desde la estación de tren a punto de partir hacia la capital del Estado: “O último concerto da banda máis importante da historia de Vigo é un feito histórico. Ademais, o feito de volver a ver á dupla Costas e Hernández enriba do escenario pois paga a pena”. Y es que en estos dos últimos conciertos de la banda que quiso acabar con los hippies de las Cíes ha habido un reencuentro singular sobre el escenario con el que, otrora, también fue cantante de la banda: Miguel Costas.

El bajista, Óscar Avendaño. | // MIGUEL OSES Redacción