Los gallegos con dos dosis de la vacuna que se hayan contagiado de COVID en esta sexta ola no tendrán que aguardar cinco meses a ponerse el refuerzo.

Aunque el criterio del Ministerio de Sanidad es que los infectados deben esperar cinco meses para recibir el refuerzo, la Xunta habilitará la opción para que aquellos que así lo decidan voluntariamente puedan llamar por teléfono y pedir la tercera inyección a las cuatro semanas. El resto serán llamados por el Sergas cumpliendo las directrices del Gobierno cuando pasen cinco meses de haber dado positivo.

Así, lo aseguró esta mañana el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, tras la reunión semanal del Consello de la Xunta. En su intervención explicó además que de los 600 casos de pacientes hospitalizados por COVID, el 40 por ciento de ellos fueron ingresados por otras patologías y una vez en el hospital se les detectó que eran positivos en coronavirus. Son 240 casos. "Si no fuera por esas otras dolencias podrían estar pasando la infección en sus casas", explicó el jefe del Ejecutivo gallego. Solo 360 están ingresados directamente por culpa del virus.

En cualquier caso, la Xunta no se plantea cambiar el sistema de cómputo de hospitalizados. Sin embargo, sí pide al Gobierno que unifique criterios sobre el registro de positivos porque hay comunidades que no incluyen en este censo los positivos fruto de test de autodiagnóstico que se hacen los ciudadanos en casa. "El protocolo cada uno lo cumple, como quiere. Nosotros seguiremos mandando todos los datos", señaló el presidente de la Xunta.