Los expertos de la Consellería de Sanidade pronosticaban el pico de la sexta ola de la pandemia del COVID para entre los días 15 y 18 de este mes, aunque con cautela: las incertidumbres generadas por la explosión de la variante ómicron hacen los cálculos más complicados, a lo que hay que sumar los cambios en el protocolo sanitario, con la validación de los autotest de antígenos o el acortamiento de las bajas. Sin embargo, parece que las previsiones de la Xunta no iban desencaminadas; Galicia tenía a las 18:00 de ayer muy pocos casos activos más que a la misma hora del día anterior y los contagios registrados también bajan a unos 4.900, frente a los más de 7.800 del día anterior.

En la vertiente negativa está el empeoramiento de la situación en las plantas de los hospitales, con 41 pacientes ingresados más que el día anterior, hasta un total de 556. De todos modos, en este caso hay que tener en cuenta el efecto fin de semana, cuando se dan menos altas. Las unidades de críticos, en cambio, mantienen una llamativa estabilidad alrededor del medio centenar de enfermos de gravedad, 54, en este caso.

Aunque los ingresos avanzan a un ritmo muy inferior al de olas anteriores, la avalancha de casos ha acabado por llegar a los hospitales. El 10 de noviembre, cuando el COVID comenzó su actual fase ascendente con la variante delta como protagonista, había en Galicia 953 casos, con 30 hospitalizados en planta y 12 en ucis. El 23 de diciembre, ya con ómicron como cepa mayoritaria, los infectados eran 21.180, con 233 ingresados en unidades convencionales y 50 en críticos. Hoy los positivos se han multiplicado por algo más de tres, lo hospitalizados en planta por dos y los críticos, permanecen casi invariables. Desde aquel día de noviembre han muerto cerca de 200 personas diagnosticadas con SARS-CoV-2.

Vigo, a la cabeza

La tendencia ascendente de los casos activos en el conjunto de Galicia se ha ralentizado en el inicio de la tercera semana de enero y se sitúan en los 72.573, que suponen 132 más que la jornada anterior a esas mismas 18:00 (el dato al cierre del día es sensiblemente superior, 74.159), al haber ligeramente más contagios (4.916) que altas (4.782), a lo que se añaden dos fallecimientos. El lunes de la semana pasada había 67.724 infecciones.

Por áreas sanitarias, los casos activos descienden en tres de las siete: Ourense (-251), Santiago y Barbanza (-129) y Lugo (-108), mientras que aumentan en las otras cuatro: Vigo (+355), Pontevedra y O Salnés (+140), A Coruña y Cee (+91) y Ferrol (+34). Por tanto, con más casos activos se mantiene el área sanitaria de Vigo, con 19.002; seguida de la de A Coruña y Cee, con 14.747; Santiago y Barbanza, con 10.700; Pontevedra y O Salnés, con 8.459; Ourense, con 8.149; Lugo, con 7.439; y a la cola sigue la de Ferrol, con 4.077.

En cuanto a la tasa de positividad en PCR --número de infecciones detectadas cada 100 test--, desciende a un 18,28 por ciento en el inicio de esta semana tras cerrar la pasada con un 21,8%. De este modo, sigue por encima del umbral del 5% que fija la Organización Mundial de la Salud (OMS) para dar por controlada la pandemia.

Las personas fallecidas diagnosticadas con Covid-19 desde el inicio de esta pandemia en toda Galicia ascienden a 2.847, al haber notificado la Consellería de Sanidade este domingo dos nuevas víctimas. En concreto, uno de los óbitos se produjo el sábado 15 de enero y correspondió a una mujer de 77 años ingresada en el CHUS y el otro, registrado este domingo pasado, fue el de un hombre de 84 años en el CHOP. Ambos presentaban patologías previas.