El idilio de James Rhodes por el gallego no cambia con el Año Nuevo. El pianista, acostumbrado a compartir en sus redes sociales mensajes en la lengua cooficial, promete aplicarse más en su estudio para 2022. Su propósito para los próximos 12 meses es "mejorar" su manejo del idioma y su caligrafía. "Este ano serei máis galeguisto (é unha palabra)?", se pregunta en Twitter.

La cascada de reacciones no se hizo esperar, la mayoría en gallego. Sus seguidores agradecen su interés y su amor por nuestra lengua, que ha empleado en numerosas ocasiones en sus publicaciones. Además, cuando alguno de sus conciertos le trae a Galicia, hace gala en la red de sus progresos y de un dominio cada vez mayor.

También suele compartir sus regalos o adquisiciones con mensajes en gallego: así lució una camiseta que decía "Riquiño" y una taza que exclamaba "Ata a cona!" que le llevaron a preguntar a sus seguidores "se é posible ser á vez riquiño e estar ata a cona".

En su participación en el  IV Foro de Educación de FARO de 2020 se enfundó en una de las camisetas más populares del año: aquella en la que aparecían tachados los nombres de Tokio, Nueva York, Madrid y París para destacar en rojo el de Vigo, en referencia al alumbrado navideño.