La alerta por temporal que azota Galicia en las últimas horas se ha levado al nivel naranja a partir de este lunes en buena parte de la costa gallega. Las lluvias que nos han estado acompañando durante todo el fin de semana persistirán en las próximas horas e incluso pueden estar acompañadas de aparato eléctrico en algunas partes del mapa. No obstante, conforme pasen las horas las precipitaciones irán remitiendo.

El viento tampoco da tregua y está soplando del suroeste con fuerza 8 en las costas de Pontevedra y A Coruña, zonas en las que el fuerte oleaje también obligará a extremar todas las precauciones, ya que se prevé que alcancen una altura de cinco metros. La racha más elevada, en todo caso, se ha registrado en la costa norte, en Punta Candieira (Cedeira) con 115 km/h. El segundo valor más alto se registró en A Pontenova (Lugo), con 110 kilómetros por hora, y el tercero, en Vimianzo, con 108. En la costa sur, la estación de Oia ha medido un intensidad máxima de casi 83 km/h.

En lo que respecta al viento en el mar, el noroeste coruñés y la Costa da Morte estarán este lunes en alerta naranja entre las 6,00 de la mañana y las 18,00 de la tarde. En cuanto a A Mariña lucense, el viento en el mar será de fuerza 7, con intervalos de 8, por lo que el nivel de alerta se quedará en el amarillo.

Por su parte, las grandes olas, que superarán los cinco metros, dejarán un aviso naranja en el litoral de A Coruña y de Pontevedra. En A Mariña será, de nuevo, de menor intensidad, con mar combinado con olas de más de cuatro metros.

En tierra, alerta amarilla

Mientras tanto, en tierra, la mayor parte del territorio restante de la Comunidad permanecerá en aviso de nivel amarillo por abundantes lluvias y fuertes rachas de viento. Pedrafita do Cebreiro, con 30 litros por metro cuadrado, fue el punto más lluvioso de la comunidad este lunes.

Previsión para fin de año

La situación continuará estando marcada por la inestabilidad hasta mitad de semana, previsiblemente hasta el miércoles, cuando las lluvias dejarán paso a una jornadas de tregua que, en principio, se mantendrá hasta el sábado día 1 de enero, cuando las lluvias volverán a Galicia para quedarse.