La sexta ola sigue creciendo imparable en Galicia, pero no acaba de anegar los hospitales como ocurrió con los embates previos a la llegada de la vacunación masiva. Este lunes, en el que la Xunta celebra una reunión clave para determinar si toma nuevas restricciones, el COVID pulveriza por segundo día su récord de casos activos: ya son 25.796, unos 1.500 más que en el anterior informe de la Consellería de Sanidade.

Estos últimos datos sí que arrojan un incremento de hospitalizaciones con respecto a la jornada anterior, aunque cabe hacer algunas matizaciones. Crecen en 27 los pacientes ingresados en planta, hasta los 246, y bajan las personas en las ucis, de 55 se pasa a 51. Los lunes suelen registrar un aumento de los pacientes en los hospitales, porque durante los fines de semana casi no se dan altas. Este efecto podría verse reforzado en este ocasión al caer la Nochebuena en viernes.

Si se observan los datos de la última semana, en la que probablemente la variante ómicron se haya convertido en predominante en Galicia, se aprecia mejor la disociación entre el frenético aumento de casos y la estabilidad en la presión hospitalaria. El lunes 20 había, según los registros oficiales, 15.856 personas contagiadas, es decir, 10.000 menos que hoy. En los hospitales, en cambio, la variación es mínima: estaban ingresadas en planta 241 (hoy son 246) y en las ucis 51 (por 52 de este lunes). A lo largo de los últimos siete días murieron en Galicia 23 personas; todas excepto una se encontraban en los hospitales. En total, las víctimas mortales anotadas en las estadísticas oficiales ascienden a 2.745.

En estos momentos, la comunidad científica se debate sobre las consecuencias de la irrupción de la variante ómicron. Hay consenso sobre que cuenta con una mayor capacidad de contagiar, y ese parece ser el factor clave que está disparando las infecciones en las últimas semanas a un ritmo nunca antes visto. Una parte de los expertos observan que se manifiesta con síntomas más leves, lo que supone un paso clave hacia el fin de la pandemia y hacia la conversión de la COVID en una enfermedad estacional mucho menos agresiva. Otro grupo considera que es la vacunación masiva, dosis de refuerzo incluidas, la único que está evitando un colapso en los hospitales, y que, en todo caso, la avalancha de infecciones se acabará traduciendo en cuadros graves de la enfermedad por una mera cuestión estadística. Lo que no está en discusión es la impacto de este vertiginoso aumento de casos en la Atención Primaria.

Nuevas infecciones

En lo que respecta a las nuevas infecciones, la cifra de 2.349 detectadas en las últimas 24 horas implica un importante descenso de 429 con respecto al día previo, cuando hubo 2.778. Cabe recordar que Sanidade notificó el sábado 3.100 infecciones, cifra récord de toda la pandemia en Galicia. De todos los positivos notificados en la última jornada, el área de Vigo vuelve a situarse a la cabeza al concentrar 647. Le siguen la de A Coruña-Cee, con 425 contagios; y la de Pontevedra-O Salnés, con 416. Tras estas, están Santiago-Barbanza, con 355; Ferrol, con 183; Lugo-A Mariña-Monforte, con 182; y Ourense-Verín-O Barco de Valdeorras, con 141.

Para analizar el descenso de la cifra de nuevos contagios detectados en el último día, hay que tener en cuenta que en las últimas 24 horas analizadas se realizaron 9.777 PCR, que son 3.801 menos que la jornada previa. Desde el inicio de la pandemia, el Sergas hizo 3.248.260 de estas pruebas.

En cuanto a la tasa de positividad en PCR —número de infecciones detectadas cada 100 test—, se sitúa en un 19,7%, lo que implica que se mantiene muy por encima del umbral del 5% que fija la Organización Mundial de la Salud (OMS) para dar por controlada la pandemia.