El 2021 está llegando a su fin. Apenas quedan un par de semanas para dar comienzo al nuevo año pero, todavía estamos a tiempo de conseguir pagar menos en la próxima declaración de la renta. Aunque no todos los ciudadanos cuentan con las mismas opciones, ya que las deducciones no son iguales en todos los tramos de la renta, existe la posibilidad de ahorrar hasta 2900 euros.

El sindicato de técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha) ha hecho una serie de recomendaciones para aplicar en este tramo final del año y ahorrar un dinerillo. Según los cálculos de la organización, un contribuyente que gane menos de 21.000 euros anuales puede ahorrarse unos 1.300 euros, mientras que el ahorro asciende por encima de los 72.000 euros para otro que ingrese más de 600.000 euros y sólo tiene que prestar atención a cinco cuestiones.

Aportación al plan de pensiones

Una de las principales ventajas fiscales se consigue mediante la aportación de dinero a un plan de pensiones. Hacienda permite a los contribuyentes descontar la cantidad invertida en ese producto de la base imponible. Se resta directamente de la base de ingresos utilizada para calcular el IRPF como si el trabajador hubiera ganado menos.

A partir del próximo año, este beneficio fiscal será menor. Los presupuestos de 2022 incluyen una rebaja del capital máximo que se puede desgravar hasta los 1.500 euros, pero este recorte no afectará en la declaración de la Renta de 2021.

Amortizar dinero de la hipoteca

Aquellos ciudadanos que hayan comprado su vivienda habitual antes del 1 de enero de 2013 y que todavía paguen la hipoteca, pueden deducirse hasta un 15% de las cantidades aportadas con un límite de inversión de algo más de 9000 euros. Los técnicos de Hacienda calculan que un trabajador puede realizar un pago adicional de 4.840 euros para amortizar la hipoteca y reducir su factura fiscal en 726 euros.

Compensar las pérdidas con ganancias

El contribuyente puede compensar las pérdidas generadas en un fondo de inversión o en acciones con las ganancias patrimoniales obtenidas. Asimismo, los rendimientos de capital mobiliario positivos como los intereses o los dividendos se pueden compensar con rendimientos negativos. La posibilidad de compensar las pérdidas con ganancias permite al contribuyente pagar impuestos solo por los beneficios reales de sus inversiones.

Donar dinero a una ONG o afiliarse a un partido

Las aportaciones de donativos a ONGs implican una deducción del 80% por los primeros 150 euros donados y del 35% de la cuantía restante. Además, Hacienda premia la fidelidad. Si un ciudadano dona la misma cantidad o superior al año anterior a la misma organización durante tres años consecutivos, el porcentaje de la cantidad restante aumenta al 40%. Según cálculos de Gestha, el ahorro fiscal medio con este gesto solidario se sitúa en 847,86 euros.

Por su parte, las cuotas de afiliación a un sindicato y a un colegio profesional son deducibles, en este último caso limitada a 500 euros.

Invertir en una empresa de nueva creación

Las aportaciones a una empresa de nueva creación pueden suponer una deducción del 30% de las cantidades invertidas durante el año con un máximo de 60.000 euros. Por tanto, la deducción será como máximo de 18.000 euros.

El contribuyente solo podrá beneficiarse de esta ventaja fiscal si su participación no supera el 40% del total del capital de la nueva empresa. Esto incluye también las participaciones de su cónyuge o los familiares de hasta el segundo grado como hermanos y tíos.

Los técnicos de Hacienda señalan que esta deducción es la más potente de la declaración de la Renta, ya que permite reducir la factura fiscal en una media de 1.274 euros pero se necesita invertir unos 4.246 euros si se quiere alcanzar esa cifra.