La retirada acelerada de la quinta ola, que algunos dieron llamar en 'juvenil', ha dejado un dato inédito en lo que llevamos de pandemia, o al menos desde que hay datos fiables: los menores de 11 años son el grupo de edad con una mayor incidencia acumulada en Galicia. En esa franja, la única que no ha accedido a la vacunación porque no hay antígeno aprobado para ellos, se registran 132 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días, cuando la media de la comunidad se sitúa en 76.

El dato de incidencia por edades muestra la influencia que tiene la inmunización en el control del COVID. Aunque los antídotos disponibles no evitan la infección, sí reducen su probabilidad. Se vio en esta ola, cuando los adolescentes y veinteañeros, que no habían recibido pinchazo alguno, tenían tasas disparadas en comparación con los grupos de edad ya inoculados. Ahora que ya han accedido a la vacunación la incidencia ha caído por debajo de los 100 casos en las personas de 12 a 29 años.

En cuanto a los niños, dentro de las dinámicas de picos y valles de la pandemia, siempre han mantenido incidencias inferiores a la media. La situación actual, en la que son el único grupo sin vacunar, abre un nuevo escenario. Acaban de comenzar, además, las clases. De momento se ha detectado un brote en un centro escolar, en Lugo.

Casos

Los nuevos contagios de COVID-19 caen a 102 en Galicia -13 menos que la jornada pasada- y la presión hospitalaria se alivia al bajar a 116 los pacientes hospitalizados por este coronavirus -tres menos-, mientras que la tasa de positividad aumenta a un 4,3 por ciento y los casos activos siguen en descenso y se sitúan en 2.580.

Así se desprende de los datos actualizados por el Sergas este viernes -con registros hasta las 18,00 horas del jueves-, en los que se recoge que suben a 32 las personas en UCI por el COVID-19 -una más- y bajan a 84 las hospitalizadas en otras unidades -cuatro menos-, mientras que 2.464 pacientes permanecen en seguimiento en su domicilio.