Sanidade ha notificado este viernes tarde la muerte de cuatro personas por COVID-19, una de ellas una joven de 30 años que estaba ingresada en el Complejo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO). Es la quinta víctima de la pandemia entre 30 y 39 años registrada en Galicia y la más joven en el área sanitaria ourensana, que suma 432 decesos.

Además de ella, en las últimas horas el virus se ha cobrado las vidas de un hombre de 87 años internado en el HULA y dos mujeres de 75 y 86 años que se hallaban en el CHUVI. Según informa Sanidade, todos padecían patologías previas.

Con ellos ya son 70 los fallecidos en agosto y 2.5326 desde el inicio de la pandemia.

La mortalidad se ha disparado este mes de agosto, con cuatro veces más óbitos que el pasado mes de junio, cuando la curva de la mortalidad por COVID-19 tocó fondo. Hasta ese mes Galicia registraba una tendencia descendente que se ha invertido a lo largo del verano. El grupo de edad entre los 80 y los 89 años es el que mayor mortandad registra, con más de mil decesos.