La Policía Nacional barajaba este jueves que la muerte de los dos jóvenes que se precipitaron de madrugada a la calle en Platja d’en Bossa podría ser un caso de violencia machista, que se vino a sumar al asesinato de una mujer a manos de su marido unas horas antes, en la noche del miércoles, en la localidad de Porqueres (Girona).
Los agentes que investigan lo ocurrido en Ibiza señalaron que podría tratarse de una muerte por violencia de género en la que habría fallecido la mujer, de 21 años y doble nacionalidad, italiana y española, al caer desde la habitación donde estaba alojada junto con su pareja, un hombre de origen marroquí de 26 años. El hombre, por su parte, se habría arrojado al vacío instantes después, indicaron en la información facilitada a los medios.
La Policía Nacional continúa con la investigación mediante la toma de declaraciones testificales para el total esclarecimiento del suceso.
Los hechos ocurrieron en torno a las 4.30 horas, según informó el Ayuntamiento de Ibiza en un comunicado, cuando la Policía Local recibió el aviso del 112 pidiendo asistencia por la caída de dos personas en el establecimiento hotelero.
Al llegar al lugar, los agentes encontraron a los dos jóvenes sin vida. Ambos estaban alojados en la misma habitación del hotel.
Hasta el establecimiento se trasladaron los servicios médicos, que solo pudieron certificar la muerte de las dos personas, y seguidamente se inició el protocolo de intervención judicial.
La Policía científica recogió por la mañana pruebas en la habitación del hotel y la llegada de más expertos de Mallorca reforzarán las labores de investigación.
El otro caso de violencia machista sucedía horas antes en el municipio de Porqueres (Girona), donde los Mossos d'Esquadra detuvieron a un hombre que confesó haber presuntamente matado a su mujer, de 48 años, a la que encontraron muerta en su casa.
El hombre acudió el miércoles, sobre las 22.00 horas, a la comisaría de Banyoles (Girona) para entregarse y explicar los hechos, según informó la policía catalana en un comunicado.
Varias patrullas de los Mossos d'Esquadra y efectivos del Sistema d'Emergències Mèdiques (SEM) se desplazaron hasta la casa donde estaba la mujer.
El cuerpo presentaba signos de violencia, y el juzgado de instrucción 1 de Girona, en funciones de guardia, llevó a cabo el levantamiento de cadáver después de que el SEM certificara la muerte.
Las diligencias finalizaron a las 5.00 horas sin que constasen antecedentes entre la pareja, según un comunicado del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC). La mujer, de nacionalidad letona, no tenía hijos menores de edad y no pesaban denuncias previas contra el agresor.
Lo que sí trascendió es que el hombre y la víctima habían recibido atención de los servicios sociales por problemas económicos, pero nunca por alguna situación que tuviese que ver con su relación, según confirmó el alcalde de Porqueres, Francesc Castañer.
La Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género confirmó que el asesinato en Porqueres fue un crimen machista, el número 16 de 2021 y el 1.094 desde que comenzaron a elaborarse las estadísticas en 2003.
De las 16 mujeres asesinadas este año presuntamente por sus parejas o exparejas, ocho eran españolas y ocho extranjeras, mientras que los agresores eran mayoritariamente de nacionalidad española (14 de 16).
Como consecuencia de estos crímenes, seis menores han quedado huérfanos, además otros dos niños han sido asesinados por sus padres en actos de violencia vicaria.
