La “batalla de Madrid” no acabó el 4 de mayo. Los rescoldos de la refriega prendieron de nuevo ayer ante la mirada atónita de los periodistas que cubrían una rueda de prensa del alcalde de Madrid –y portavoz del PP–, José Luis Martínez Almeida, y la delegada del Gobierno en la capital, Mercedes González.

Almeida calificó de “espantajo jurídico” el vacío legal tras el estado de alarma, a lo que la política socialista replicó que “a lo mejor el carajal está en Madrid” al rechazar la presidenta de la comunidad, Isabel Díaz Ayuso, el toque de queda.

“Me parece de cachondeo que el Gobierno diga, ante el caos de falta de marco jurídico, que sean las comunidades autónomas las que pidan el estado de alarma”, argumentó Almeida. “A mí lo que me parece un cachondeo es lo que estamos viviendo”, contestó González, que pidió a Almeida que no actuara como portavoz del PP y dejase de “utilizar la pandemia para atacar al Gobierno de Pedro Sánchez. Estoy aquí para defenderle cada vez que le das una patada”, espetó.

Lo que debió haber sido una rueda de prensa rutinaria sobre el operativo de San Isidro se tornó en pelea de gallos. “Cuando uno siembra una falsa libertad recoge libertinaje”, dijo Mercedes González. Almeida le recordó que hubo aglomeraciones para celebrar el fin del estado de alarma también en Barcelona, Salamanca y Sevilla. “De aquí sacamos un disco de Pimpinela”, dijo en tono de humor la delegada del Gobierno, intentando zanjar la agria polémica.

Hubo también tensión tras las declaraciones de la ministra de Exteriores, Arancha González Laya, insinuando que Reino Unido había vetado el turismo en España por culpa de los malos datos de Madrid. La presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, reclamó al Gobierno que deje de “criminalizar” a la sociedad madrileña con los “estigmas” de “cañas, toros y borrachera”. Ayuso pedirá al grupo parlamentario del PP que impulse tras su toma de posesión una comisión de investigación en la Asamblea de Madrid sobre el tránsito en el aeropuerto de Barajas y su relación con la incidencia del coronavirus en la comunidad.