Asegura que el estrés y la incertidumbre que genera la pandemia, unido a hábitos de la nueva normalidad como el teletrabajo, practicar menos deporte o acostarse más tarde, han provocado que en los últimos meses aumenten los ciudadanos con algún tipo de trastorno del sueño. Intentar desconectar del “bombardeo de información diaria “sobre el virus con una película o un libro o ir siempre a la cama a la misma hora son algunos consejos del vicepresidente de la Sociedad Española del Sueño y jefe de la Unidad del Sueño en el Hospital de la Ribera (Valencia), Francisco Javier Puertas, para lograr un mejor descanso nocturno..

–¿Se duerme lo suficiente en España?

–Durante la semana se genera cierta deuda crónica del sueño que se intenta recuperar el fin de semana al dormir más o echarse una siesta larga. El problema de España es que robamos horas al sueño. Muestra de ello es que el horario de máxima audiencia en televisión es a las 23.30 horas, cuando la mitad de europeos ya están en la cama. Y por la mañana a las siete menos siete muchos tienen que levantarse para ir a trabajar, llevar a los niños al colegio... La mitad de españoles duerme menos de siete horas al día.

–La pandemia ha provocado más trastornos del sueño como el insomnio. ¿Cómo evitarlos?

–Para dormir necesitamos que nuestro reloj interno esté sincronizado y darle cuerda porque tiende a desfasarse. Nuestro organismo necesita de unas rutinas: por las mañanas, en horas de sol, se precisa de más actividad, interacción social y de noche, menos actividad física y una cena ligera para promover el reposo. Además, en plena pandemia conviene no bombardear al cerebro con malas noticias antes de dormir, hay que propararlo para desconectar y eso lo podemos hacer con una película, música relajante o una novela. En la cuarentena se juntaron diferentes hábitos no saludables: hacer menos ejercicio, acostarse más tarde, llevarse la tablet a la cama, estar menos al sol, el teletrabajo que hace que se pase en pijama de la cama al ordenador y sin apenas movilidad...

–Las farmacias han notado un aumento de la demanda de productos naturales que mejoran el descanso nocturno. ¿Le parece adecuado recurrir a ellos?

–Todo ayuda, pero siempre que no se abuse de ellos. Una investigación acaba de descubrir que el aroma de lavanda ayuda a tener un sueño más profundo y de mejor calidad. Igual una bolsa con hojas secas en la habitación, ayuda. Y se sabe que las tisanas con pasiflora o valeriana tienen un efecto sedativo.