Dos equipos de sanitarios procedentes de Francia y Luxemburgo llegaron ayer a Portugal para ayudar a atender a pacientes covid en los presionados cuidados intensivos del país, una asistencia que se une a la desplegada por Alemania a principios de este mes. El aterrizaje de los equipos, cada uno compuesto por cuatro profesionales, fue confirmado por el primer ministro, el socialista António Costa, en un mensaje en su cuenta de Twitter.

“Agradezco el apoyo de los equipos luxemburgués y francés que hoy llegaron a Portugal y que van a apoyar a nuestros profesionales de salud en este combate”, puede leerse en el mensaje, en el que subraya la necesidad de “ir reforzando el esfuerzo de vacunación”.

El equipo luxemburgués, compuesto por dos médicos y dos enfermeros, trabajará en el departamento de Medicina Intensiva del Hospital de Évora, próximo a la frontera con Extremadura, y el francés, con un médicos y tres enfermeros, se desplazará al Hospital Garcia de Orta, en Almada, dentro del área metropolitana de Lisboa. Ambos grupos permanecerán en Portugal durante al menos 15 días.

Esta colaboración se une a la prestada a principios de este mes por Alemania, que envió un contingente militar compuesto por 26 soldados sanitarios expertos en medicina intensiva, que actualmente trabajan en el Hospital da Luz de Lisboa, un centro privado que mantiene acuerdos con el sistema de salud público.

El apoyo internacional aumenta el mismo día en que Portugal notificó 138 muertes por COVID-19, un mínimo que no se veía desde hace algo más de un mes, y 1.677 nuevos casos de coronavirus, la cifra más baja en lo que va de año y que llega tras un mes de confinamiento en el país.

Los datos han sido calificados por Costa en Twitter de “progresos importantes”, aunque, insistió, se debe “persistir para conseguir reducir aún más la incidencia de la pandemia”.