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Así se celebra un funeral online para 400 espectadores

Ana Sancio y Juanjo Yepes, hija y yerno del fallecido, y Lucía Solís, la viuda, ayer, en el tanatorio de Cabueñes. / ÁNGEL GONZÁLEZ

Dar el último adiós a un ser querido se ha convertido en un acto, además de doloroso, complejo por las restricciones sanitarias que ha provocado la pandemia de coronavirus. De ahí que se estén desarrollando modelos hasta ahora inéditos para este duro trance. Una familia de testigos de Jehová de Gijón será de las primeras en esta ciudad en usar una fórmula basada en la plataforma telemática “Zoom”, que permite desarrollar encuentros sociales a través de internet, es decir, manteniendo las pertinentes distancias de seguridad. Y sin tener que renunciar a la filosofía de “amor al prójimo y protección al colectivo”.

Lo cuenta Ana María Sancio, que acaba de perder a su padre, Pedro Sancio. Con el beneplácito de toda la familia, ha decidido organizar un evento de despedida a través de internet, para que todos los allegados, amigos y conocidos puedan estar presentes de forma virtual y darse “consuelo unos a otros”. El acto, denominado conferencia bíblica, tendrá lugar el sábado.

El último adiós, por vía telemática

“El deseo de mi padre era tener una conferencia bíblica cuando muriera. Así que hemos hecho lo posible para que todo el mundo pueda participar. Y esta es la única manera sin incumplir las actuales normas”, relata Sancio. Para ello, la familia ha contratado una conexión para un millar de personas, muchas de las cuales ya han recibido de forma personalizada una invitación con el enlace para sumarse al acto. Al resto se le ha informado a través de la esquela, y los interesados pueden contactar con los allegados para que les hagan llegar el enlace de conexión. Será una sesión de lectura de la Biblia de una media hora de duración, en la que un orador preparará las lecturas y reflexiones “sobre la muerte, la esperanza después de la vida y para darnos consuelo unos a otros”, explica Sancio. La conexión se hará desde el domicilio de cada participante. Y puede que al final de la sesión se habiliten salas más pequeñas online para poder hablar de forma personalizada, porque esperan contar con la participación de “unas 300 o 400 personas”. “Mi padre era muy conocido y querido”, explica la mujer.

La herramienta no es nueva para los testigos cristianos de Jehová, dado que cuando empezó la pandemia el pasado mes de marzo las reuniones en los salones del Reino, como se conocen los lugares donde celebran sus actos religiosos, fueron sustituidas ya por encuentros periódicos por “Zoom”. “Se decidió entonces que era el método más seguro y así lo hemos venido haciendo desde entonces en nuestra comunidad”, explica la familia gijonesa, convencida de que “hay que adaptarse a los nuevos tiempos”. Pero sí será de las primeras veces que se despide a alguien con este método, inédito hasta la pandemia. “Es lo que toca y lo mejor que podemos hacer para mantener la seguridad siguiendo también las normas que nos marcan las autoridades”, dicen.

Contra la soledad

De hecho, en la página web de referencia de este credo se han venido compartiendo información útil para sobrellevar la pandemia e incluso descargarse la Biblia online para su lectura y estudio, como venían haciendo en las reuniones presenciales, y convertir así las nuevas tecnologías en una forma de seguir llegando a los demás y “evitar la soledad que nos imponen estos tiempos”.

Por eso, la despedida que le brindarán el próximo sábado a Pedro Sancio no será ni mucho menos un acto frío. “Será un encuentro lleno de gente que, desde sus casas, nos hará sentirnos arropados”, dice Sancio. Las nuevas tecnologías también están ya al servicio de las despedidas más dolorosas.

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