La Policía Local de Sitges (Barcelona) interceptó el pasado jueves un coche conducido por un niño de 9 años con su madre de copiloto y su hermano de tres meses en una silla en el asiento posterior. Según han explicado fuentes policiales a Europa Press, unos agentes que realizaban un patrullaje ordinario observaron a un turismo que “les dio una sensación extraña, ya que no veían el conductor del coche y había una mujer en el asiento del copiloto”, y le hicieron señales para parar el vehículo. Cuando los agentes pararon el turismo, observaron que había un niño en el asiento del conductor, su madre en el asiento del copiloto y un bebé de tres meses en una silla en el asiento posterior.