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Nuevo orden en el pastillero: aumentan los depresivos, bajan los antibióticos

La dispensación de antidepresivos y otros productos calmantes, como somníferos y valerianas, se ha disparado

Tiempos de Prozac

En “Más Platón y menos Prozac”, Lou Marinoff se sirve de los grandes filósofos de la historia para ayudar al lector a afrontar los principales y más habituales aspectos de la vida: el amor, la ética, el trabajo y la muerte. Pero no contempló la posibilidad de una pandemia. En este último supuesto, el Prozac se abre camino. Lo constata el estudio “Tendencias Cofares”, que analiza la evolución de los productos sanitarios en las farmacias durante la segunda ola del COVID-19 (del 1 de septiembre al 30 de noviembre), que revela que la dispensación de antidepresivos y otros productos calmantes, como somníferos y valerianas, se ha disparado.

Según el estudio, en el periodo de marzo a noviembre de 2020, la demanda de fármacos antidepresivos incrementó un 4,8 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior, aunque el análisis matiza que durante los meses de la segunda ola, es decir, desde septiembre a noviembre, el aumento de estos fármacos es de un 6% con respecto a 2019, lo que quiere decir que la demanda está aumentando a medida que se prolonga la crisis sanitaria.

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Según los autores del informe, este incremento puede estar asociado a la necesidad de paliar la “fatiga pandémica”, que según la Organización Mundial de la Salud (OMS) es una respuesta natural y esperada a una crisis de salud pública prolongada, o el “estrés crónico” generado por la situación de pandemia que describe el empeoramiento de los casos a medida que va pasando el tiempo.

La fatiga pandémica, nueva dolencia de la sociedad

La fatiga pandémica, nueva dolencia de la sociedad Vídeo: Agencia ATLAS | Foto: EFE

“Esta situación causa ansiedad, depresión, estrés, malestar. La gente está mucho más tiempo metida en casa, las familias no pueden verse.Todo esto tensa. Un estado de ánimo bajo es normal ante una situación así y la lluvia y la falta de luz tampoco ayudan”

Clemente García - Farmacéutico

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En similares términos se expresa la farmacéutica viguesa Amil López Viéitez, que añade un tercer factor a la fatiga pandémica y al estrés crónico. “Este aumento en el consumo de antidepresivos y ansiolíticos se aprecia desde el confinamiento, pero ahora, además, está la ‘astemia post covid’, que se caracteriza por cansancio extremo, bajón de ánimo, hipersensibilidad, y que hace que se consuman más estos productos”, comenta.

Una persona, con ansiolíticos en su mano.

La pandemia también nos quita el sueño, ya que junto a los antidepresivos, otros productos de salud indicados para calmar el sistema nervioso como valerianas y somníferos también han aumentado su demanda, concretamente un 23,3% de marzo a noviembre con respecto al año anterior. Además, observando el periodo de septiembre a noviembre, el aumento es del 8,5 % con respecto a 2019. Así, si bien la demanda de este tipo de productos sigue al alza, durante la primera ola fue especialmente significativa. Según López Viéitez, las vitaminas, la jalea real y el ginseng son otros de los productos más demandados para hacer frente a la fatiga pandémica.

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El análisis “Tendencias Cofares” realizado en julio ya identificó un aumento del 34,5 % en la demanda de los suplementos vitamínicos en el periodo comprendido entre el 15 de marzo y el 14 de abril, influenciado por el aislamiento y una mayor preocupación por fortalecer el sistema inmunológico y paliar la falta de sol. Ya en la segunda ola y coincidiendo con la etapa otoñal, en la que habitualmente hay más demanda de suplementos vitamínicos, ha continuado este aumento, con un incremento de un 8,4% (830.000 unidades) con respecto a los mismos meses de 2019.

Y mientras la demanda de Prozac y multivitamínicos continúa subiendo, la de antibióticos ha bajado un 27,8% de septiembre a noviembre de 2020. Y unido a la caída de estos fármacos, los productos probióticos –un tipo de suplemento que contiene microorganismos vivos, bacterias o levaduras y que muchas veces se recomiendan junto a la prescripción de los antibióticos para minimizar su efecto en la flora intestinal– también han visto incrementada su demanda en 33,4%.

¿Para qué vamos a la farmacia?

¿Para qué vamos a la farmacia? Carla Pesqueira

Varias son las razones que explican el descenso de antibióticos, aunque los farmacéuticos gallegos tienen claro que la de mayor impacto son las medidas de protección contra el COVID-19: uso de mascarilla, lavado de manos y distanciamiento social. “Hay menos infecciones y menos gripes debido a las mascarillas”, afirma García.

En este sentido, López Viéitez, recuerda que esta medida de protección no es una barrera únicamente para el SARS-CoV-2. “La mascarilla no solo nos protege del coronavirus, sino de los virus que producen la gripe y el catarro.Por eso, este año no se están viendo casos de estas enfermedades respiratorias”, afirma la farmacéutica.

El artículo del año: la mascarilla

Desde el inicio de la vuelta a los colegios en España hasta finales del mes de noviembre se confirma un incremento muy significativo de productos de protección infantiles frente al COVID-19 de cerca de siete veces más en comparación con 2019. Concretamente este aumento se refleja en las mascarillas infantiles, que han registrado un incremento en el periodo septiembre-noviembre del 672,6% con respecto al mismo periodo del año pasado.

Se dispara la venta de mascarillas

Se dispara la venta de mascarillas Agencia ATLAS

Junto a las mascarillas, los farmacéuticos gallegos detacan como el otro artículo estrella desde que comenzó la pandemia, los geles hidroalcohólicos, otra de las patas de las medidas se seguridad contra el coronavirus. El uso en adultos también la demanda de este producto también ha ido aumentando y, según los farmacéuticos gallegos, también ha variado.

"La gente está mucho más concienciada y aunque las mascarillas quirúrgicas siguen siendo la más demandadas, desde hace un mes, se están usando más FFP2. La gente cada vez es más consciente del riesgo de estar en un sitio cerrado”,

Clemente García

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Las informaciones sobre la nueva variante detectada en el Reino Unido. más contagiosa que las conocidas hasta ahora, han contribuido aún más a concienciar a la población sobre esta necesidad de protegerse, según García.

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