La pericia de los agentes de la Guardia Civil de Tráfico para identificar a los infractores de las normas de circulación no conoce límites. La última prueba de esta habilidad se ha registrado en la carretera valenciana CV-435 que une Montroi con Dos Aguas, donde un usuario de la red social SocialDrive, en la que miles de conductores comparten alertas, ha grabado un vídeo que muestra un vehículo de la Benemérita oculto entre los árboles de una parcela agrícola privada junto a un radar móvil tapado entre las ramas de los naranjos. Se trata de un punto negro muy frecuentado por los motoristas.

Es una carretera muy estrecha, que no tiene arcén ni espacio disponible para aparcar. Los agentes que pretendían esconder el radar para que su presencia pasara desapercibida a los conductores no tuvieron otra opción que introducir su vehículo dentro de la parcela agrícola. Lo aparcaron entre dos tiras de árboles. Era imposible verlo desde la calzada. Mucho más indetectable era el dispositivo que fotografía los vehículos que exceden los límites de velocidad. Gracias a su pequeño tamaño, al cobijo que le ofrecía quedar instalado entre el ramaje del naranjo y de espaldas al sentido de la marcha resultaba muy improbable descubrirlo.

La localización del radar tampoco era arbitraria. La carretera CV-435 enlaza Montroi y Real con Dos Aguas suele tener mucho más tráfico del que cabría suponer tratándose de una vía tan secundaria. Muy cerca se encuentra la urbanización Balcón de Montroy, aunque el tránsito provocado por los residentes de ésta y otras urbanizaciones y chalés diseminados por la zona no es lo más relevante: aquello que preocupa a la Dirección General de Tráfico es el elevado número de accidentes que se registran en ese punto.

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La razón de esa siniestralidad, según han reconocido fuentes policiales, es la importante presencia de motoristas y ciclistas que se produce durante los fines de semana. La carretera, repleta de curvas y desniveles es muy apreciada por los amantes de las dos ruedas, pero su estrechez y la escasa visibilidad de algunos tramos la convierten en un auténtico peligro para los conductores.