El Gobierno se prepara para intervenir Madrid, a no ser que el Ejecutivo de la comunidad que dirige Isabel Díaz Ayuso aplique medidas más duras para frenar la transmisión del coronavirus. El ministro de Sanidad, Salvador Illa, subrayó ayer que "está en riesgo la salud de los ciudadanos", y el científico que iba a ejercer de puente entre ambas administraciones, el eminente microbiólogo gallego Emilio Bouza, presentó su dimisión como portavoz del Grupo Covid-19 ante el espectáculo de las ruedas de prensa simultáneas de Illa y del viceconsejero de Salud madrileño y el inexistente clima de concordia prometido. Solo ha durado 48 horas en el cargo.

"Estamos trabajando ya en ello", señalan fuentes de Moncloa citadas por El Periódico de Catalunya, del mismo grupo editorial que FARO. El Gobierno planea tomar las riendas de Madrid. El viernes se llegó a hablar incluso de la aplicación del artículo 155 de la Constitución, pero se baraja aplicar la ley de salud pública, cuyo artículo 52.3 faculta al Gobierno a adoptar "cuantas medidas de intervención especial resulten precisas por razones sanitarias de urgencia o necesidad o ante circunstancias de carácter extraordinario que representen riesgo evidente para la salud de la población, y siempre que la evidencia científica disponible así lo acredite".

Otra posible vía sería el decreto de nueva normalidad, del 9 de junio, pero Moncloa tampoco descarta volver a pedir la declaración del estado de alarma para aplicarlo a Madrid. No necesitaría la autorización del Congreso, aunque debería obtener la aprobación de la Cámara Baja para prorrogar su vigencia transcurridos 15 días.

Todo esto se baraja después de que Salvador Illa pidiese a la Comunidad de Madrid "revisar sus decisiones y escuchar a la ciencia" a la hora de gestionar la pandemia del coronavirus. "Hay que ver los datos de la Comunidad de Madrid, cuando digo que está en riesgo la salud de sus ciudadanos, lo digo porque es así", afirmó ayer. "Esto no es una batalla ideológica; es una batalla epidemiológica contra el virus", dijo el ministro de Sanidad, que añadió que Madrid debe seguir los consejos de la comunidad científica tal como asegura que está haciendo el Ministerio.

Illa insistió en que "hay que tomar el control de la pandemia en Madrid. En otras comunidades autónomas se ha hecho". El ministro se defendía así de las acusaciones de las autoridades madrileñas, que apuntaban que no se exigían las mismas medidas a otras regiones con tasas de incidencia acumulada similares a las de Madrid, como Navarra, Castilla-La Mancha y Castilla y León.

"Mensaje de confusión"

El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, acusó a Illa de "enredar" al "mandar un mensaje de confusión a los ciudadanos" de Madrid al comparecer el viernes en rueda de prensa al mismo tiempo que la Comunidad de Madrid explicaba las nuevas restricciones adoptadas en la región.

"No hay que enredar, porque al margen de que el Gobierno de la Nación entienda que no son las medidas adecuadas, no es la mejor imagen para los ciudadanos que cuando la Comunidad de Madrid trasnmite esas medidas como autoridad sanitaria, se haga una rueda de prensa simultánea", criticó el regidor madrileño y portavoz nacional del PP.

Y es que, añadió, "son decisiones que afectan a los madrileños y que todos esperaban conocer", por lo que no comparte que "al mismo tiempo el ministro salga contraprogramando y mostrando tan abiertamente" su parecer, algo que considera solo contribuye a "enredar" y "mandar un mensaje de confusión a los ciudadanos".

El doctor Emilio Bouza presentó ayer su dimisión como portavoz del Grupo Covid-19 de la Comunidad de Madrid, apenas dos días después de ser designado para el puesto tras ser elegido por consenso entre el Gobierno regional y el central.

El científico vilalbés adoptó esta decisión tras comprobar las discrepancias que existen entre el Ejecutivo de Pedro Sánchez y el de Isabel Díaz Ayuso para gestionar el avance del coronavirus.

"Las circunstancias que he presenciado en los dos días siguientes (a su nombramiento), junto con la contemplación de las ruedas de prensa simultáneas del viernes 25, me obligan a renunciar y a declinar el ofrecimiento", explica Bouza en una carta, a la que tuvo acceso Efe, enviada al ministro de Sanidad, Salvador Illa, y al consejero de Sanidad madrileño, Enrique Ruiz-Escudero.

"Recordarán que ustedes me afirmaron su voluntad de concordia política y su impulso para trabajar unidos para buscar una solución al problema. Me pidieron actuar como técnico y científico en el consejo creado por ambos gobiernos y, además, en base a mi trayectoria profesional, hacer de portavoz de los acuerdos del grupo". Y añade: "Sencillamente, he podido comprender que ese no es mi puesto en las actuales circunstancias".

Bouza iba a atender las demandas informativas de la sociedad como portavoz técnico sanitario del Grupo Covid-19, integrado por el Gobierno de España y el Ejecutivo de la Comunidad de Madrid para coordinar y planificar respuestas contra la pandemia.