Cómo comenzó el turismo en las islas, la vida de los monjes medievales, los barcos piratas, todas las leyendas, los escritores que las describieron, la visita de los poetas en 1954... todo eso y mucho más lo encontrará el lector en "Cíes. Las islas de Vigo", una obra única y extraordinaria de 211 páginas de la que es autor el exdirector de FARO y cronista oficial de Vigo, Ceferino de Blas. El libro, iniciativa editorial de FARO con la colaboración de la Alcaldía de Vigo, llegará a partir del próximo sábado día 1 de agosto a los kioscos.

Con la obra, un profuso y esmerado trabajo que podrá adquirirse por tan solo 5 euros, tendrá el lector respuesta a todo cuanto quiera saber del mágico archipiélago vigués.

Las Cíes que visitan a diario miles de personas, no fueron turísticas hasta hace medio siglo. Contienen una historia, cargada de acontecimientos: desde los fenicios que traficaban con estaño a Julio César, a quien derrotaron los herminios, y sólo logró vencerlos por el hambre. En el medievo llegaron los monjes, que construyeron dos conventos, uno de ellos muy milagroso, que atraía infinidad de fieles. Gracias a ese carácter sacro los monjes convivieron con los piratas que, en buen número -vikingos, argelinos, turcos, corsarios franceses e ingleses-, recalaban con sus barcos en las playas. Hasta que el más famoso de ellos, Francis Drake, arrasó conventos y edificaciones, a finales del siglo XVI, y despobló las islas.

No volverían a ser habitadas hasta 1840, en que se instalan dos industrias salazoneras, se edifica el hermosos faro, y llegan algunos colonos. Durante ese tiempo fue territorio de caza y pesca.

En sus aguas naufragaron barcos de guerra, transportes y lanchas de pesca, que forman pecios de gran importancia para la arqueología submarina, y desde hace más de un siglo se buscan los tesoros de Indias.

El turismo comienza en 1906, cuando la Infanta Isabel de Borbón, pide viajar hasta las islas. Las visitas se incrementan después de la I Guerra Mundial, y el turismo se convierte en un fenómeno social, a partir de los años setenta. Actualmente las Cíes son el destino más demandado de Galicia tras la catedral de Santiago. Las visitas han tenido que ser reguladas

Escritores y poetas han colmado a las islas de elogios y las han envuelto en leyendas, que las hace más atractivas.

| Episodios y misterios de las Cíes. Descubra cómo vivieron sus pobladores , desde los fenicios a los últimos colonos de los años sesenta. La vida de los monjes del medievo, los piratas normandos y berberiscos, los naufragios, y la destrucción de todos los edificios por las tropas de Drake.

| ¿Quién inauguró el turismo a las islas? ¿Sabía que fue la Infanta Isabel de Borbón, la popular "Chata", fue la que inauguró el turismo a las Cíes? Ocurrió en el año 1906, cuando veraneó en un hotel de Vigo dos semanas. Navegó en un barco de guerra al que siguió un yate con vigueses. Dos años después el yate "Wolverine" comenzaría las giras turísticas de verano.

| Cumbre mundial de los poetas. Las Cíes siempre entusiasmaron a los poetas, pero en el año 1954, más de un centenar de ellos viajaron a la isla Norte en una Jornada del III Congreso Internacional de Poesía, y fue tal su asombro que las divinizaron con sus pensamientos. Por eso las llaman islas de los poetas.

| Desde la prehistoria hasta la actualidad. La mayoría de las islas no tienen más historia que la de su fauna, pero las Cíes están henchidas de acontecimientos, desde la prehistoria a la actualidad. Por eso son objeto de libros, que innumerables autores les dedicaron, desde la arqueología a la poesía, pasando por la novela y los libros científicos. Este gran patrimonio cultural resalta su importancia.

| Compendio de historia y de contrastes. Las Cíes son un compendio de historia y de contrastes: solar de monjes y tierra de milagros y leyendas, baluarte que defiende la ría de Vigo, refugio de piratas, territorio de caza, almacén de industrias salazoneras, cetárea y parque de ostricultura, y desde hace medio siglo el lugar más deseado por los turistas que acuden a Galicia.

| Tierra sagrada. Las islas más turísticas del Atlántico: En el medievo fueron tierra sagrada con florecientes monasterios y conventos, donde se obraban milagros, que atraían a miles de devotos. Las visitó un rey de León.

| De isla de los dioses a isla de los poetas. De islas de los dioses, como las llamaban los antiguos, por su sacralidad, a islas de los poetas, desde que un centenar de ellos las visitó en 1954, y los dejó extasiados por su belleza.

| Leyendas y misterio. Las leyendas del bergantín fantasma y de la ciudad sumergida, que contaban Castroviejo y Cunqueiro, envuelven de misterio el ambiento de las islas en las noches de niebla densa.

| El archipiélago que amansa la bravura del Atlántico. Las Cies amansan la bravura del Atlántico para convertir la ría de Vigo, como escribió Pérez Galdós, en un inmenso lago.

| La islas de Vigo. El famoso escritor de viajes, Francisco de Paula Mellado, escuchó en Baiona, en 1850, que a las Cies las llamaban las islas de Vigo.

| El recuerdo de las míticas costas de la Odisea. La llegada de los poetas a Cíes fue como un deslumbramiento. Dijeron: las arenas de las playas suenan como las cuerdas de un violín cuando se las pisa y recuerdan las míticas costas de la Odisea.

| El corpus literio y cultural. Son innumerables los escritores y poetas que no han podido resistirse al contemplar las Cíes y las han descrito con palabras y versos que hacen incontable el corpus literario y cultural sobre el archipiélago.

| Asignadas a Vigo desde 1840. Las Cíes fueron objeto de disputa por su propiedad, en diversas épocas, entre ayuntamientos limítrofes, hasta que en 1840 la reina María Cristina las asignó al Ayuntamiento de Vigo. Por eso son las Islas de Vigo.