El líder del Partido Popular, Pablo Casado, advirtió ayer en Alicante que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, "no puede lavarse las manos" ante los brotes de casos de coronavirus que se están dando en los últimos días, y ha pedido medidas que eviten "cierres prolongados de la sociedad" que puedan afectar a la economía. El presidente del PP hizo estas manifestaciones durante su intervención en la clausura el decimoquinto congreso provincial del PP de Alicante, y señaló igualmente que el Gobierno "tiene la obligación de coordinar, dirigir y amparar" a toda la población.

Por ello, ha pedido "responsabilidad" y ha acusado al Ministerio de Sanidad de "pasividad" a la hora de emitir protocolos de prevención sanitaria, frente a las órdenes dictadas por "Andalucía, Murcia y, ahora, la Generalitat Valenciana" para convertir en obligatorio el uso de mascarillas.