Ante una parada cardíaca, el tiempo que se tarda en iniciar las maniobras de reanimación es clave para la supervivencia del paciente. Cada minuto que pasa, las probabilidades bajan un 10%. Si normalmente cuatro de cada diez personas que sufren una parada en la calle o en su casa no reciben asistencia hasta que llegan los sanitarios, este porcentaje ha aumentado un 15% durante la pandemia por miedo al coronavirus. Por ello, desde la Fundación Española del Corazón recuerdan que es "vital" la reanimación cardiopulmonar y que es posible hacerla de "forma segura". En tiempos de pandemia se mantienen las comprensiones en el pecho y desaparece el boca a boca.

Los cardiólogos españoles alertan que de más de la mitad (el 55%) de paradas cardíacas "no recibieron reanimación cardiopulmonar básica (RCP) durante el estado de alarma", según revela un estudio realizado en Lombardía (Italia) y publicado en el "New England Journal of Medicine". Pese a que el Covid obliga a variar el protocolo de actuación, no debe ser un obstáculo para actuar. "Con las medidas de protección básicas el riesgo de contagio es muy bajo", indica el coordinador del Grupo de Trabajo de RCP de la Sociedad Española de Cardiología, Pablo Jorge.

Pero ¿cómo reanimar a quien ha sufrido un infarto en la nueva normalidad que obliga a guardar la distancia de seguridad? Lo primero, según la Fundación Española del Corazón y el Consejo de Resucitación Cardiopulmonar -que incluye en su web una guía europea sobre estas maniobras en época de Covid-19- es comprobar que el paciente no respira, pero siempre de forma visual, sin acercarse ni a la boca ni a la nariz. En caso de ser así, debe llamarse al 112 con el manos libres e instar a alguien a buscar el desfibrilador más cercano rápidamente ya que la reanimación debe iniciarse de forma inmediata (si se tarda 5 minutos, por ejemplo, las probabilidades de supervivencia se reducen a la mitad).

"Antes de empezar las maniobras de RCP, hay que asegurarse de que tanto el testigo como la víctima, llevan mascarillas. Si el testigo lleva guantes, mucho mejor", indican estas sociedades científicas, donde instan a "realizar entre 100 y 120 comprensiones por minuto en el centro del pecho de la víctima y continuar con las maniobras hasta que lleguen los sanitarios y siempre sin realizar el boca boca". Si se cuenta con un desfibrilador habrá que seguir las indicaciones que se le marquen por teléfono y cuando finalicenlas maniobras, habrá que lavarse bien las manos con gel o agua y jabón.

El nuevo protocolo para practicar la RCP en época de Covid-19 también afecta a los profesionales sanitarios o incluso a los socorristas de las playas que este año no podrán hacer ventilación boca a boca. Las guías indican que los primeros deberán combinar la compresión torácica con ventilación a través de mascarilla-balón autoinflable conectado a oxígeno y pausando las comprensiones durante la ventilación para evitar aerosoles, todo ello con los equipos de protección adecuados para evitar contagios. Los socorristas recurrirán a un ambú que insufla aire en el paciente a través de una mascarilla.