La directora xeral de Administración Local, Marta Fernández-Tapias, ha mantenido este viernes una reunión con el presidente y el vocal de la Federación Provincial de Furanchos, a quienes ha informado de que, siempre que cumplan con las medidas higiénico sanitarias establecidas por el Estado, pueden solicitar a los ayuntamientos la apertura de sus locales hasta el 31 de julio. El colectivo reclamaba poder abrir todo agosto para poder dar salida a todo su vino.

En concreto, tal y como ha precisado durante la reunión, el inicio de su actividad está permitido desde el 11 de mayo en aquellos casos en que prestan el servicio al aire libre y desde el pasado lunes, 25 de mayo, cuando desarrollan la actividad en el interior.

Los furanchos, locales en los que sus propietarios venden el excedente del vino de cosecha propia, son establecimientos abiertos al público que deben seguir también las restricciones marcadas en materia de salud pública y prevención de la COVID-19.