El sector de la restauración en Italia cuenta con alrededor de 1,2 millones de trabajadores y tras las presiones de las regiones los restaurantes podrán comenzar a abrir a partir del 18 de mayo, pero bajo estrictas reglas. Las medidas para reabrir restaurantes y las playas fueron publicadas ayer en sendos informes del Instituto Nacional de Sanidad y el Instituto de Seguridad Laboral. Para las playas aún no hay una fecha para su reapertura y existe el problema de que en Italia la mayoría de las playas y sus servicios son privados.

Entre las normas que habrán de aplicarlos restaurantes, destacan:

- Distanciamiento entre mesas. El documento recomienda remodelar la disposición de las mesas y los asientos, definiendo un límite de capacidad que proporcione un espacio no inferior a cuatro metros cuadrados para cada cliente. Es opcional la división con barreras.

- Obligación de reserva. Se indica como una herramienta de prevención adicional, también útil para evitar reuniones de personas que esperan fuera del lugar.

- Sin bufé ni carta. Se debe eliminar el servicio de comida en bufé o similares. Para mitigar los riesgos asociados con el contacto con las superficies, se aconseja utilizar formatos de presentación de menú alternativos a la tradicional carta, por ejemplo, escritos en pizarras o impresos en hojas desechables.

- Mascarillas antes y después de comer. Los clientes deben usar la mascarilla en las actividades preparatorias o después de la comida en la mesa, así como también a la hora de ir a pagar o al baño. camareros y cocineros usarán mascarillas y guantes en todo momento.

- Otras medidas. Favorecer los pagos electrónicos, sin dinero en efectivo; ubicar desinfectantes a la entrada y los baños; desinfectar el local al final de cada servicio de comidas así como todas las mesas y otros utensilios. Se deben evitar herramientas y recipientes reutilizables como saleros, vinagreras y aceiteras, añade el documento.