El Gobierno alemán parte de la base de que los ciudadanos de su país no podrán hacer sus vacaciones en el extranjero este verano a causa de la pandemia del Covid-19, aunque sí habrá oportunidad de hacer turismo interno con restricciones.

"Los grandes viajes al exterior más bien no serán posibles. Todo apunta a un programa de vacaciones en el interior. Creo que eso sí será posible este verano", afirmó el responsable de Turismo del Ministerio de Industria alemán, Thomas Bareiss, tras una videoconferencia con sus colegas de la Unión Europea.

También en el caso del turismo interior deberán extremarse las precauciones, añadió, tanto en lo que respecta a las normas de distanciamiento social como al uso de desinfectantes.

El titular de Exteriores, Heiko Maas, advirtió ya hace unos días de que no podían esperarse este verano unas "vacaciones como las habituales" a causa de las restricciones a la libre circulación.

Maas recordó, asimismo, la complejidad que ha supuesto la repatriación a Alemania de unos 230.000 ciudadanos que quedaron varados en distintas partes del mundo cuando empezaron a cerrarse fronteras y a suspenderse vuelos ante la extensión de la pandemia.

Este llamamiento a los viajes por el interior del país realizado por el Gobierno alemán supondrá un enorme perjuicio para el sector turístico en España. Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en 2019 un total de 11.176.545 turistas alemanes visitaron España siendo la segunda procedencia mundial, por detrás de Reino Unido, con 18.078.076 millones de turistas

Alemania es el quinto país del mundo más afectado por la pandemia. La universidad estadounidense Johns Hopkins, elevaba ayer los contagios en Alemania a 158.142 y a las víctimas mortales a 5.985.

Desde ayer el uso de mascarilla es obligatorio en comercios, transporte público y trenes de larga distancia en gran parte de Alemania, con multas de entre 25 y 10.000 euros para quien las incumpla.

En la última reunión entre Merkel y los líderes regionales se acordó una gradual vuelta a la actividad escolar y la reapertura de los comercios pequeños o de dimensiones medias. Siguen cerrada la hostelería -que puede servir comida para llevar-. De la próxima reunión, el jueves, entre la canciller y los "Länder" podría salir una línea común para los oficios religiosos y la Bundesliga.