Corea del Sur celebró ayer unas elecciones legislativas entre estrictas medidas sanitarias para evitar nuevos brotes de coronavirus durante la votación y en un momento marcado por una importante estabilización de los contagios en el país asiático. Estos comicios, que renuevan los 300 escaños de la Asamblea Nacional (Parlamento), se contemplaron además como un referéndum a cuenta de cómo ha manejado el actual Gobierno liberal del presidente Moon Jae-in la pandemia. El Partido Democrático de Moon Jae-in partía como favorito para obtener la mayoría de escaños dada la aparente buena gestión de la crisis del coronavirus y a lo que indican las encuestas de popularidad, que en las últimas semanas muestran un crecimiento de la tasa de aceptación del presidente, que actualmente supera el 50 %

Las medidas para votar fueron estrictas; no se podía ir sin máscara y a la entrada de los centros de votación había que tomarse la temperatura (no se permitía votar a quienes superaran los 37,5 grados) y limpiarse las manos con alcohol.

Justo antes de entrar había que ponerse también unos guantes de plástico desechables (que deben tirarse nada más terminar) y tratar de mantener una distancia de al menos un metro al hacer cola.

"Cuando he llegado y he visto a tantos funcionarios encargándose de tomar la temperatura, de que nos limpiemos las manos... me he quedado más tranquilo", cuenta a Efe Cheol-woo, de 25 años, en un centro de votación de Seúl.

La convocatoria se ha mantenido gracias a que las autoridades están logrando de momento controlar la propagación del virus en Corea del Sur, que desde hace una semana apenas contabiliza en torno a 30 nuevas infecciones diarias y que ha logrado ya dar de alta al 75% de sus casi 10.600 contagiados.

Desde que detectó su primer gran brote a final de febrero, el país asiático ha pasado de ser el segundo más afectado del mundo a aplanar su curva de contagios en solo tres semanas gracias a un programa que combina testeo masivo de sospechosos de contagio, seguimiento exhaustivo de rastros de infección y hospitalización generalizada. La Comisión Nacional Electoral (NEC) logró instalar centros de votación en los ocho centro médicos con más ingresados del país para que ejercieran su derecho por adelantado.