Italia constató ayer un frenazo en el número de contagios de coronavirus y el total de casos aumentó solo en 3.309 personas, hasta los 135.586, la menor subida desde el 13 de marzo, aunque las autoridades insisten en mantener alta la guardia.

"Se confirma una disminución de la tendencia de crecimiento de los contagiados", celebró el jefe de la Protección Civil italiana, Angelo Borrelli, nada más comenzar su rueda de prensa diaria.

Los datos indican que continúa la tendencia de ligero descenso en la propagación del virus desde que se detectó el primer caso autóctono en el país, el pasado 21 de febrero. De hecho es la menor subida desde los 2.547 casos registrados el 13 de marzo, hace casi un mes.

Actualmente hay 94.067 personas enfermas, "solo" 880 más que las registradas el lunes, el aumento más bajo desde el pasado 10 de marzo, indicó Borrelli.

De los actuales enfermos, 28.718 se encuentran ingresadas con síntomas, 3.792 en cuidados intensivos y la mayoría, 61.557, se recuperan en sus casas con síntomas leves. Los fallecidos en Italia atribuidos al coronavirus ascienden a 17.127, al registrarse 604 más en las últimas 24 horas, una cifra inferior a la del día anterior.

Otro dato positivo es que un total de 24.392 personas ya se han curado, de ellas 1.555 en las últimas 24 horas, la segunda cifra más alta desde que se registra en la evolución de la pandemia en Italia.

Y caen también el número de personas en cuidados intensivos, lo que da aliento a los hospitales, a menudo al borde del colapso.

"Finalmente parece que se empieza a ver una disminución en los nuevos casos. Tras una fase de meseta, la curva empieza a bajar (...) y la situación empieza a mejorar", subrayó en rueda de prensa Gianni Rezza, del Instituto Superior de Sanidad (ISS).

El científico insistió en la necesidad de perseverar en el bloqueo del país, con sus tiendas cerradas y sus ciudades confinadas al menos hasta el 13 de abril, y avanzó que después este virus "se quedará entre la población" aunque se reduzca la amenaza.

Cautela

Por la mañana, el comisario italiano para gestionar la crisis del coronavirus, Domenico Arcuri, advirtió que no es el momento para confiarse por los últimos datos positivos e insistió en que Italia "no está a pocos pasos de la salida" de esta situación."Ningún algoritmo ni tendencia puede cancelar el número de vidas humanas perdidas. Sabemos que el número de mujeres y hombres que morirán seguirá creciendo", señaló.