El coronavirus no solo es el argumento para que muchos internos soliciten la excarcelación por miedo al contagio, sino también el motivo por el que otros prefieren ingresar en prisión y cumplir penas de cárcel que podrían eludir con el pago de multas.

"He perdido el trabajo y no se de que voy a vivir, no tengo ni para comer ¿con qué pago la multa?", le expuso un delincuente común pendiente de juicio a su defensa, cuando ya habían acordado prácticamente con la Fiscalía el pago de la multa para evitar seis meses de cárcel. Una situación que los abogados creen que irá a más cuando se levante la alerta.

También hay internos que tiene prácticamente cumplida su condena y han solicitado cumplir lo que les queda confinados en casa. Es el caso de un pontevedrés al que le faltan 4 meses, pero no le han concedido la excarcelación.