El coronavirus se ha cobrado ya miles de víctimas en España, algunas de relevancia mediática. Una de las últimas ha sido Consuelo Garrido, natural de A Merca y madre del concejal del Partido Popular Miguel Ángel Blanco, asesinado por ETA en 1997. Hace tres semanas falleció también el padre, Miguel, que era de Xunqueira de Espadanedo.

Fue el PP vasco el que dio a conocer la muerte de Consuelo Garrido, que pese a no participar de la primera línea política, como su hija Mari Mar, no ha dejado de reivindicar públicamente la memoria de su vástago asesinado. Cargos como Iñaki Oyarzabal han expresado su pesar a través de las redes sociales.