El Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial solicitaron que los tenedores de deuda de países pobres aplacen los pagos para ayudarles en términos de liquidez a luchar contra la pandemia del coronavirus. La petición ya fue formulada a los países del G20 por parte del presidente del Banco Mundial y ahora se extiende a todos los "acreedores bilaterales".