La medicina ha logrado convertirla en una enfermedad crónica en el mundo occidental, pero en los 80 y los 90 el sida mataba a miles de personas, y aún lo sigue haciendo en África. "Philadelphia" (1993), protagonizada por un escuálido Tom Hanks como enfermo de sida (ahora padece el Covid-19 en la vida real) como enfermo de sida, y por Denzel Washington, fue una de las primeras películas de Hollywood que abordó de manera directa este drama. La dirigió Jonathan Demme, que un par de años antes había triunfado con "El silencio de los corderos", y que era conocido en el mundo del rock por sus videoclips y por la excelente "Stop making sense" (1984), centrada en un concierto de Talking Heads. Demme le había dirigido algunos videos a Bruce Springsteen, así que tenía con él la confianza suficiente como para encargarle la canción principal de "Philadelphia". "Bueno, dame un tiempo, pero no te prometo nada", le contestó el Boss. Poco después el rockero de Nueva Jersey grabó el tema en solitario, cantando y tocando teclados y batería electrónica. Y le envió la cinta por correo a Demme.
La noche ha caído, estoy despierto
Puedo sentir que me desvanezco
Así que recíbeme, hermano, con tu beso sin fe
¿O nos abandonaremos solos así?
En las calles de Filadelfia
"Me senté con mi esposa a escucharla y al terminar estábamos literalmente llorando", contó el director neoyorquino, fallecido hace dos años. Demme, que ya tenía otra balada para la banda sonora, la que le proporcionó Neil Young (titulada "Philadelphia"), quería un himno rock del autor de "Born in the USA", y en su lugar recibió una canción triste e introspectiva. Por fortuna, le hizo caso a su mujer, Joanne, que le dijo: "Estos artistas confían mucho más en tu película que tú mismo, así que pon la canción de Springsteen al frente y cállate".
La canción, a la se añadió el saxofón del célebre músico de jazz Ornette Coleman (1930-2015), fue incluida en la banda sonora junto a temas del citado Neil Young, Peter Gabriel, Sade, Spin Doctors y María Callas, entre otros, y después en recopilatorios del Boss. Ganó cuatro premios Grammy y el Óscar a la mejor canción original. Tom Hanks ganó también el Óscar al mejor actor.
En el videoclip, que intercala imágenes de la película, Bruce Springsteen aparece caminando desaliñado por los suburbios pobres de Filadelfia. Su voz al cantar fue grabada con un micrófono oculto para conseguir mayor autenticidad.
"Philadelphia" nos recuerda los estragos que puede hacer un virus en la sociedad, más cuando va acompañado del estigma de la discriminación, en este caso de los homosexuales.
Aunque no tenga nada que ver con la película, Filadelfia fue también la ciudad estadounidense que en 1918 celebró un gran desfile durante la epidemia de "gripe española" en Estados Unidos. La irresponsabilidad de las autoridades de esta ciudad de Pensilvania al permitir esa aglomeración costó miles de vidas. En cambio, San Luis tomó medidas y logró aplanar la curva epidémica. Otra historia de Filadelfia que en España quisieron ignorar hace ahora dos semanas.
