Por iniciativa de una emisora de Países Bajos, 162 radios de la Unión Europea emitieron ayer a las 8.45 horas esta canción popularizada por Gerry and the Pacemakers en 1963 y amplificada por los seguidores del Liverpool. En España la emitió Radio Nacional de España. Pocas canciones proporcionan tanto consuelo y resultan tan reconfortantes, porque esa fue precisamente la intención de sus compositores originales dos décadas más atrás.

Cuando camines a través de una tormenta

Mantén la cabeza bien alta

Y no tengas miedo a la oscuridad

Al final de una tormenta

Hay un cielo dorado

Y el dulce cantar plateado de una alondra

Camina a través del viento

Camina bajo la lluvia

Aunque tus sueños sean arrojados y destruidos

Camina, camina

Con esperanza en tu corazón

Y nunca caminarás solo

Si ya pone un nudo en la garganta leer la letra de la canción, no digamos ya escucharla de los pulmones de los seguidores del Liverpool o del Celtic, desde la célebre grada The Kop del estadio de Anfield o en el Celtic Park de Glasgow. Quienes la escribieron no la concibieron para un grupo pop como Gerry and the Pacemakers, ni mucho menos para una hinchada de fútbol. Fueron los maestros del musical Richard Rodgers y Oscar Hammerstein II, conocidos para la posteridad como Rodgers y Hammerstein, que la compusieron para el musical de Broadway "Carousel" (1945). La canta la prima de la protagonista para reconfortarla y animarla tras la muerte de su marido. Después, el grupo de Liverpool Gerry and the Pacemakers, que compartían ciudad de origen, manager (Brian Epstein) y productor (George Martin) con los Beatles, adaptó la letra y llevó la canción al éxito en 1963. Fue el tercero de sus tres primeros sencillos, y los tres alcanzaron el número 1 de las listas del Reino Unido, un récord que duró 20 años, hasta que lo rompió Frankie Goes to Hollywood. Más de un centenar de artistas importantes, entre ellos Frank Sinatra y Elvis Presley, la han grabado.

Quienes durante estos días tenéis que trabajar y volvéis a vuestras casas caminando solos por calles desiertas, sabed que no camináis solos. Todos somos The Kop.