La situación de emergencia sanitaria provocada por el coronavirus ha trastocado el día a día de la sanidad mundial y también, obviamente, de la viguesa. El hospital Álvaro Cunqueiro está teniendo que centrar gran parte de sus esfuerzos a los pacientes infectados, a los que llegan con síntomas y a intentar frenar contagios. Mientras, el resto de actividad del hospital se está viendo considerablemente afectada. Muchas intervenciones quirúrgicas que no son urgentes, por ejemplo, ya se están suspendiendo. Según explica el jefe de servicio de Cirugía Cardíaca del Chuvi, Juan José Legarra, en su departamento ya se han anulado todas las operaciones que no sean inaplazables. "Hemos reducido un 50% nuestra actividad quirúrgica, solo entramos en quirófano por las mañanas", informa. "Pero hay pacientes que, por ejemplo, se les infecta un marcapasos y no les podemos enviar a su domicilio. Tenemos que tratarlos", asegura.

Con el aplazamiento de intervenciones también se liberan camas en planta y se evitan las nuevas citas que generan las cirugías, como revisiones o rehabilitación. Además, se reduce el número de personas que entra en el complejo para tratarse o para acompañar

En los últimos días, además, la gerencia del hospital vigués ha planteado a los distintos jefes de servicio la posibilidad de trasladar personal de distintos departamentos a la UCI o a Urgencias si, como está previsto, los pacientes con coronavirus repuntan en las próximas semanas. Una medida que, de momento, todavía no se ha puesto en práctica. Este posible traslado en cirugía cardíaca, tal y como asegura el doctor Legarra, podría suponer un inconveniente. "Por mi parte no hay ninguna oposición a esta medida. No obstante, en nuestra especialidad solo estamos cinco cirujanos y tres residentes. Ahora mismo estamos trabajando todos, pero a partir de la próxima semana el objetivo es empezar con las libranzas. Y solo nosotros podemos afrontar cirugías urgentes de corazón y cardiovasculares. Si a alguno lo envían a apoyar el dispositivo contra el coronavirus nos quedaríamos casi sin personal", afirma Juan José Legarra.

También se han visto afectadas las consultas externas. Solo se están haciendo de forma presencial las urgentes y, aquellas que no lo son se acometen en la mayoría de casos ya en formato de teleconsulta. El objetivo: reducir al máximo las visitas de pacientes al hospital para evitar su exposición a posibles contagios.