Italia ha adoptado una serie de medidas para frenar el contagio del coronavirus y la más llamativa es que impone por decreto un metro de distancia entre personas, al estimar que es la distancia adecuada para evitar que las gotitas de saliva que dispersamos al hablar, estornudara y toser lleguen a los demás. Estas gotitas son las que transmiten el coronavirus. La norma es obligatoria en las regiones más afectadas por el virus: Lombardía, Veneto, Emilia-Romaña y las provincias de Savoa y Pesaro-Urbino.

Italia registra por el momento más de cuarenta fallecidos y camina hacia los 2.000 contagiados, desde que hace casi dos semanas se registró el primer positivo en el país, por lo que el Gobierno de Giuseppe Conte ha aprobado un decreto que incluye también mantener aislada la "zona roja" - la más afectada-. El Gobierno ha divido al país en tres zonas: la roja, la más castigada y que incluye los 11 municipios más afectados; la amarilla, que comprende Lombardía, Véneto y Emilia Romaña, y finalmente el resto del territorio nacional..