La Iglesia recaudó 284,4 millones de euros en el último ejercicio a través del 0,7% del IRPF, lo que supone un total de 16,6 millones de euros más que el año anterior a nivel nacional. Una cifra con la que alcanza su máximo histórico y en la que uno de cada tres contribuyentes (32,3%) decide marcar la casilla a favor de la Iglesia y aportar una media de 35 euros por persona, según informó el vicesecretario de Asuntos Económicos de la Conferencia Episcopal, Fernando Giménez-Barriocana, al presentar en Madrid los datos de la asignación tributaria registrados en la declaración de la renta 2019, correspondiente a la actividad económica de 2018.
Unos ingresos en los que Galicia incide muy poco, pues es de las comunidades que menos aporta a través del IRPF. Las declaraciones de la renta a favor de la Iglesia suben en casi todas las comunidades tras unos años de estancamiento por la crisis económica, pero sólo los contribuyente catalanes resultan más reticentes que los gallegos a ceder parte de sus impuestos y marcar con una X la casilla de la Iglesia en la declaración de la renta. Los datos facilitados ayer indican que en el último ejercicio en Galicia hubo 328.786 asignaciones a la Iglesia, un 24,90% de declarantes que supusieron unos ingresos de 10.170.751 euros.
Es una situación que se mantiene año tras año y que cada vez alcanza mayor diferencia con la media nacional. Así, sólo uno de cada cuatro gallegos marca la casilla de la Iglesia cuando la media es uno de cada tres. En 1997 lo hicieron 334.057 personas, frente a las 328.786 de un año después, lo que supuso una pérdida de ingresos de 482.896 euros en un año.
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El posible "despiste" del que presenta la declaración, o bien que muchas pensiones y salarios se sitúan entre las rentas más bajas sin obligación de declarar, son dos causas a tener en cuenta, según los expertos, si bien está claro que a la hora de aportar dinero el número de católicos se reduce en Galicia año tras año.
A nivel nacional en el último ejercicio se registraron 7,2 millones de declaraciones a favor de la Iglesia, lo que supone 26.885 más que el año anterior. Teniendo en cuenta las declaraciones conjuntas, más de 8,5 millones de contribuyentes destinan a la Iglesia el 0,7% de sus impuestos. Barriocanal agradeció ayer estas aportaciones y destacó que no solo los contribuyentes de años anteriores han reiterado su confianza en la Iglesias, sino que otros nuevos "se han incorporado a esta gran familia de aquellos que confían en la Iglesia". Tras resaltar que los 284,4 millones de euros ingresados es la cifra más alta desde el inicio de la asignación tributaria del nuevo sistema que basa la colaboración del Estado con la Iglesia en la voluntad personal de cada contribuyente, el vicesecretario para Asuntos Económicos de la CEE manifestó que se trata de un modelo en crecimiento.