La imagen del nuevo portavoz en el Congreso de Unidas Podemos, Pablo Echenique, frente a la mesa central de los taquígrafos durante los debates de investidura es un reflejo de los obstáculos a los que las personas con discapacidad tienen que enfrentarse en su día a día. Aunque no es el primer diputado del Congreso con discapacidad física -antes pasaron por él Francisco Vañó e Ignacio Tremiño-, sí es el primero que es portavoz, y por su cargo tendrá que usar la tribuna de oradores, actualmente innacesible para una persona con sillas de ruedas, y presidir muchas reuniones en distintas estancias del Congreso, lo que ahora mismo es una carrera de obstáculos para el portavoz de la formación morada. Los representantes de asociaciones de personas con discapacidad de Galicia consideran inconcebible que esto suceda en una democracia del siglo XXI que inicia su 14 legislatura y que solo ahora se baraje la posibilidad de acometer reformas en el hemiciclo para garantizar su accesibilidad.
Para Anxo Queiruga, presidente de la Confederación Galega de Persoas con Discapacidade (COGAMI) y de la Confederación Española de Personas con Discapacidad Física y Orgánica (COCEMPE), que Echenique ocupe una portavocería dará visibilidad al colectivo y contribuirá a seguir trabajando de cara a la inclusión. "Su nombramiento demuestra que la sociedad es cada vez más diversa y que las personas con discapacidad tenemos cada vez una mayor presencia en ella. Espacios como el Congreso tienen que estar también pensados para todo el mundo. Lo que no puede ser es verlo en el medio por no poder acceder a la tribuna. Esto no debería pasar en el siglo XXI", asegura Queiruga, que lamenta que las barreras continúan siendo el día a día de las personas que se mueven en sillas de ruedas.
"Hablar de accesibilidad me apena porque es algo por lo que llevamos luchando más de cuarenta años y seguimos encontrándonos barreras. Hay muchas personas encarceladas en sus casas por problemas de accesibilidad. Y se puede acabar con las barreras. Es una cuestión de voluntad política", añade.
Queiruga afirma que la discapacidad es un tema transversal y pide al nuevo Gobierno que no la trate como un elemento de cambio o de debate. "Las políticas sociales hay que impulsarlas de una manera decidida y que sea de una forma transversal. A las personas con discapacidad nos afecta lo que a cualquier otra persona, por tanto, se nos tiene que tener en cuenta en temas como el trabajo, la sanidad, el ocio, el deporte...", opina.
Concepción Somoza, gerente de la Asociación de Familias de Personas con Parálisis Cerebral (APAMP), sostiene que el mero hecho de que tenga que reformarse el Congreso para que Echenique pueda acceder a la tribuna y ejercer su labor de portavoz es ya muy significativo. "Una cosa tan básica como esa ya evidencia las dificultades a las que se enfrentan las personas con movilidad reducida", afirma. En su opinión, el nuevo portavoz del Gobierno de coalición contribuirá a que la sociedad ponga el foco en la persona y no en su discapacidad. "Es muy importante que se tenga en cuenta a la persona por su perfil profesional y por su valía, con independencia de la discapacidad que tenga o no, y demuestra que podemos estar en cualquier actividad de la vida social", sostiene.
Para Somoza, también es relevante que por primera vez haya una vicepresidencia de Servicios Sociales y Dependencia. "Confío en que esto suponga que vamos a hacer un esfuerzo mayor para ese cuarto pilar del bienestar del que tanto se habló con la Ley de Dependencia llegue al día a día de las personas", afirma.
Somoza espera que el nuevo Gobierno trabaje para que las personas con discapacidad tengan los mismos derechos que el resto de los ciudadanos y no solo sobre el papel. "Tienen que poder desarrollarse como cualquier otro ciudadano y por lo tanto, tener acceso a los mimos recursos, y me refiero a una educación inclusiva, empleo, áreas en las que aún queda mucho por hacer", apela.
Para Delmiro Prieto, de la Federación de Síndrome de Down de Galicia, "todo cuenta y todo suma", aunque lamenta que aún hoy se tenga que hablar de un portavoz parlamentario por sus limitaciones y no por sus capacidades. "Algún día no tendremos que hablar de estos temas, aunque sabemos que aún queda mucho por hacer y que no será fácil. Las barreras más duras de derribar no son las físicas, sino las que tenemos interiorizadas en nuestra cabeza. Donde tiene que empezar a cambiar la sociedad es en la educación", afirma.
En su opinión, es lamentable que espacios como el Congreso no estén adaptados. Asimismo, pide al nuevo Gobierno que "no le tiemble el pulso" a la hora de tomar decisiones importantes para la sociedad, como la educación. "Lo primero que tiene que hacer es derogar la LOMCE, porque es la ley de la antieducación, porque es mercantilista, excluyente y segregadora, y si segrega a las personas diferentes no podemos avanzar en una sociedad solidaria, comprometida y respetuosa", sostiene.
