El doctor Francisco Gómez-Ulla indicó varios consejos para evitar pasar de una miopía leve a una patológica, grave. Así, recomendó la detección precoz en la infancia mediante reconocimientos que el cree que se deberían iniciar entre el primer y segundo año de vida.

Además, se debe corregir el defecto visual con gafas o lentillas. Para frenar el avance, recordó que actualmente ya está disponible un medicamento que consiste en un colirio de atropina superdiluida al 0,01% del que se aplica una gota al día durante un máximo de cinco años. "Se ha demostrado que se desacelera la progresión de la miopía entre el 25 y el 50%", añadió el catedrático en Oftalmología.

"Yo digo: o videojuegos o cultura de la visión. Tenemos que fomentar en niños pequeños el juego al aire libre y de día para evitar que se desarrolle la miopía elevada. Quince horas a la semana de los niños al aire libre es muy importante", opinó.

También hizo referencia a la diabetes como culpable de la pérdida de visión. "La mitad de los diabéticos desconoce que tiene la enfermedad. En Galicia, hay más de 40.000 personas. Aparecen lesiones en la mácula y es la primera causa de ceguera legal en personas por debajo de los 60 años", agregó.

"Hay que tener en cuenta que la salud visual es la principal preocupación de los pacientes con diabetes. Tiene solución,las inyecciones intravítreas de varios medicamentos", defendió.

La OMS, hace diez años, fijó un objetivo: disminuir la ceguera evitable en más del 20%. Este año se tiene que ver si se cumplirá o no. En el año 2019, en la ONCE, la mayor parte de las enfermedades causantes de ceguera eran las propias de la afectación de la retina que permite captar la luz y transmitirla al cerebro.