Desde Berlusconi al Vaticano, Paolo Sorrentino ha dado su visión, lúcida e irónica, de los grandes baluartes del poder en Italia. A punto de estrenar The new pope y dar el salto a Hollywood, el ganador de un Oscar por La Gran Belleza avanza la posibilidad de una tercera temporada.

"Tengo una idea para la tercera temporada, si los productores quieren estoy listo", aseguró en una entrevista con varios medios hispanos durante el pasado Festival de Venecia en la que se definió como "aspirante a católico".

"Es difícil creer en Dios, pero me gusta cómo cuentan la historia, es un buen guion", señaló el cineasta napolitano que, tras retratar en la gran pantalla a Andreotti ( Il Divo, 2008) y a Berlusconi ( Silvio y los otros, 2018) dice que no quiere saber más del cine político.

Su próximo proyecto es rodar en Estados Unidos, junto a Jennifer Lawrence, la adaptación de la novela Mob Girl, basada en la vida real de la mafiosa e informante del FBI Arlyne Birckman.

The new pope, una producción de Sky, HBO y Canal+, llega a las plataformas el próximo viernes, como la continuación de The young pope (2016), la serie que puso patas arriba el Vaticano con un papa estadounidense -Pio XIII/Jude Law- fumador, seductor y ultraconservador.

En el arranque de esta temporada Pio XIII sigue en coma y el trono papal es ocupado por John Malkovich que da vida a John Brannox, un aristócrata culto y locuaz pero también frágil y misterioso.

"Malkovich es una especie de dandy en la vida real", sostiene Sorrentino. "Es sabio, irónico, divertido y un gran contador de historias, es distante y cálido al mismo tiempo, robé todo de su personalidad para el personaje".

También dice de él que hace que todo parezca fácil. "Y es porque en el fondo sabe que nada de esto es importante; yo también lo creo, el cine es un juego maravilloso pero no es tan importante y eso hace que pueda ser increíble, poderoso y divertido".

Aunque la coexistencia de dos papas trae inevitablemente a la mente la situación actual con Benedicto XVI y Francisco, Sorrentino se esfuerza por evitar las alusiones directas.

La "vía media" que representa Brannox se inspira, asegura, en la filosofía del cardenal Newman, de tiempos de León XIII, y también tiene algo de San Francisco de Asís. Sobre la trama se limita a avanzar que se abrirá más "a los problemas del mundo contemporáneo", cuestiones como el fundamentalismo, la crisis de los inmigrantes, la relación con la homosexualidad o los abusos a menores.

Preguntado por la situación política actual en Italia confiesa su "miedo al populismo" y a que cualquiera, sin formación, pueda acceder al poder. "Los políticos deberían estudiar, nadie va a un dentista sin diploma, pero hay esta idea de que cualquiera puede ser político, y eso es peligroso".

The new pope contará con 'cameos' de Sharon Stone y Marilyn Manson que, según Sorrentino, es 'fan' de la serie. "Vi en una revista que llevaba en su móvil una foto de The young pop', así que pensé que si le llamaba quizás vendría. Y sí, vino enseguida", dice sobre el músico.

"Me sorprendió lo buen actor que es, y también pinta. Le pedí un cuadro para la película y luego me lo regaló, lo tengo colgado en casa".

Pese a que ya van dos temporadas, el director confiesa que el Vaticano sigue siendo un misterio para él. "Nadie sabe qué pasa ahí dentro en realidad". Lo que sí sabe es que la mayoría han visto la serie. "En el Vaticano ven la serie, pero si hablas con ellos y les preguntas te dirán que no la ven, o que quizá de pasada, pero yo sé que la han visto".