María Neira, directora del Departamento de Salud Pública de la Organización Mundial de la Salud (OMS) fue ayer una de las protagonistas de la cumbre del clima COP25 que se celebra en Madrid, donde los expertos de Naciones Unidas insistieron en los graves impactos que está causando el calentamiento global. Neira aseguró que los efectos sobre la salud son cada vez "más severos y frecuentes actualmente en todo el planeta", contrariamente a lo que se pensaba anteriormente que afectaban solo a los países del hemisferio sur.

Algunos de esos efectos, añadió, "son, por ejemplo, el incremento de la transmisión de enfermedades tropicales, como el dengue o la malaria". Neira compartió jornada con la reina Letizia, quer estuvo acompañada por la ministra de Sanidad, María Luisa Carcedo, quien se acercó para participar como oyente en el panel dedicado al impacto sobre la salud. En su intervención, Neira declaró que "el impacto del cambio climático sobre la salud es enorme" porque, "desestabiliza nuestros pilares que nos garantizan la salud, es decir, el acceso al agua potable, a la comida, a la energía limpia y o tener un hogar, lo que obliga a mucha gente a emigrar porque las condiciones de vida se han vuelto intolerables".

Según el informe de la OMS presentado ayer martes, más de cien países han desarrollado planes sanitarios relacionados con el cambio climático, aunque sólo 48 de ellos ha vinculado programas de adaptación y vulnerabilidad sobre la salud. Neira incidió en la preocupación de la OMS ante los resultados del estudio, en el que se ha detectado que, de los 101 países analizados, "casi todos señalan la salud como una prioridad", pero, a la hora de canalizar los fondos para paliar la crisis del cambio climático, solo se destina el 3 % de los fondos a ese fin.

"Nos preocupa -dijo Neira- que las mismas emisiones que son responsables del calentamiento global, son también responsables de la contaminación del aire que causa la muerte de 7 millones de personas al año en todo el mundo". En este sentido, apuntó que en "Latinoamérica esta contaminación del aire en las ciudades tiene un impacto muy alto en la salud de las personas y ese es uno de los aspectos más preocupantes e importantes para la OMS", más aún teniendo en cuenta que para los próximos años la ONU ha señalado que más del 70 % de la población mundial vivirá en centros urbanos. En el área mediterránea, es importante "obviamente todo lo que venga de la desertificación o del aumento del nivel del agua del mar y la transmisión de ciertas enfermedades, añadió la experta.

La doctora Neira insistió en que las causas del cambio climático son "las responsables de la contaminación que nos está invadiendo de alguna manera de forma dramática y, por lo tanto, hay que atacar a las causas para rápidamente visualizar los beneficios para la salud".

Los estudios científicos han visto las consecuencias de la contaminación sobre la salud con enfermedades como el asma, problemas pulmonares o cáncer, entre otros, pero las partículas van al riego sanguíneo y es importante saber que "pueden provocar otras enfermedades", apuntó el doctor Campbell-Lendrum, director del departamento de Cambio Climático en la OMS. "Es importante", por ello, "aumentar la ambición climática para luchar contra la contaminación y las emisiones causantes del calentamiento global". Según Campbell-Lendrum, "el coste de no actuar ahora supondrá el doble para los sistemas de salud en el futuro".

El "coste de no actuar es pagado por todos", por ello "es importante que todos entendamos la importancia de la descarbonización, así como el incremento de los fondos financieros y económicos a los sistemas de salud, concluyó Neira.