Una vez pasado el 'Black Friday', el 'Cyber Monday' se convierte en el día por antonomasia de comprar por internet. Pese a que adquirir productos a través de un clic está a la orden del día, es importante recordar unos principios básicos para que sean seguras.

Comprar en páginas web y aplicaciones oficiales o de confianza; usar conexiones seguras; ser conscientes de los datos que proporcionamos; pagar con tarjeta de crédito -si es específica para transacciones 'online' mejor- y desconfiar de los grandes chollos son algunas de las máximas a tener en cuenta.

1. Compra en webs conocidas

Hay que tener sentido común; si no nos fiamos al 100% de una oferta o de una página es mejor no entrar. Es mejor recurrir a páginas de renombre, recomendaciones de amigos y familiares o, directamente, consultar las plataformas web de tiendas físicas que ya conocemos de nuestras compras del día a día.

2. Comprueba la reputación de la tienda

Si aún tenemos dudas, una vez elegida la tienda, podemos buscar opiniones 'online' de las experiencias de otros usuarios. Existen múltiples foros en los que consultar cómo han sido las compras de otros internautas. Para comparar te recomendamos que busques "comprar nombre de la empresa opiniones" en Google y aparecerá la información que necesitas.

3. Lee la política de privacidad de la página

Este punto no se suele realizar pero nos puede ser muy útil. Las páginas de e-commerce suelen contar con una pestaña en la que detallan su política de privacidad, es decir, qué hacen con los datos que el usuario les proporciona a través de la compra. Para que sea seguro, es primordial que la página especifique que no utilizará tus datos con terceros sin previo consentimiento.

4. Busca el https://

El Hypertext Transfer Protocol Secure es un protocolo de aplicación destinado a la transferencia segura de datos, es decir, es la versión segura de navegar 'online'. A la hora de introducir los datos de compra, busca siempre que el inicio de la URL en la que estás realizando tu compra comience por https://.

5. Consulta la política de devoluciones

Antes de comprar, no te olvides de leer la política de devoluciones. Según la legislación española, en la mayoría de los casos, dispones de un plazo de 14 días desde la recepción de un artículo para retractarte de la compra.

Sin embargo, la mayoría de tiendas tienen sus propios plazos que debes consultar en sus condiciones de venta. De paso, asegúrate de que conoces de antemano los gastos de envío y los impuestos que sean de aplicación.

6. Asegúrate de que haya un contacto

En caso de que tengas dudas, busca los datos de contacto del sitio web y asegúrate de que cuenta con un número de teléfono y una dirección de correo electrónico de atención al cliente. Este paso es primordial en el caso de que tengamos algún problema en nuestra compra.

7. Da sólo datos necesarios

Para comprar 'online' no es necesario que le cuentes toda tu vida a la empresa. En realidad, tan sólo serían necesarios tu nombre y apellidos, la dirección de envío, tu fecha de nacimiento (para comprobar que eres mayor de edad) y los datos de pago.

No obstante, no introduzcas nunca el PIN de tu tarjeta, no es necesario en ninguna compra. Si te preguntan datos más allá de los anteriormente citados, empieza a sospechar y busca otra web.

8. Utiliza redes y terminales seguros

A nadie le interesa tu información bancaria así que asegúrate de que realizas tu compra desde un red segura, es decir, no compres 'online' desde una red WiFi abierta porque puedes ser objeto de ataques informáticos. Para ello, utiliza siempre una red propia o con seguridad para evitar complicaciones.

Asimismo, usa terminales privados como puedan ser tu ordenador o tu dispositivo móvil y evita ordenadores públicos como los de las bibliotecas o universidades. Si no tienes más remedio, nunca dejes abierta la sesión y borra el historial de navegación tras finalizar tu compra.

9. Lleva un registro de tus compras

Para evitar sustos, lleva un registro de todas tus compras online durante el Black Friday y el Cyber Monday. Muchas tiendas envían a sus clientes un correo electrónico con los detalles de cada compra. Imprímelos de cara a llevar un histórico de compras que te sirva para comprobar tu saldo bancario.