El doctor Juan José González Soler insistió en que las estrategias de prevención pasan por el reconocimiento de la obesidad como enfermedad crónica y han de abarcar desde el ciudadano y su familia hasta el modelo educativo, la sociedad y las propias administraciones. "Las campañas de concienciación que se limitan a la escuela, sin contar con la familia han demostrado que no son eficaces. Hay que actuar también sobre la familia y sobre el entorno del niño", insistió.
El ponente también explicó al público que asistió al Auditorio Municipal do Areal las principales opciones terapéuticas que hay en estos momentos para tratar a pacientes con sobrepeso y obesidad, tratamientos cada vez más seguros y menos invasivos que están teniendo, además, una gran eficacia, como la colocación del balón intragástrico y las técnicas endoscópicas de reducción de estómago y de cirugía bariátrica. Sin embargo, insistió en que los cambios de hábitos nutricionales y el ejercicio físico son claves en cualquier programa de tratamiento.
Dentro de la dieta, resaltó la mediterránea, que ha demostrado científicamente sus beneficios sobre la prevención de enfermedades cardiovasculares, y por extensión la atlántica, que incorpora una ingesta mayor de pescado. Asimismo, aprovechó para advertir sobre las dietas milagro, que pueden poner en grave riesgo la salud, y recomendó desconfiar siempre de las propuestas que prometen perder mucho peso en poco tiempo y sin cambiar de hábitos de vida. "El tratamiento de la obesidad ha de hacerse siempre en una unidad especializada y por un equipo multidisciplinar. Ha de ser un tratamiento individualizado e integral de todos los aspectos de la obesidad", concluyó.
