Nueve forenses testifican este jueves en la nueva sesión de la vista oral por el crimen de Diana Quer, que se sigue contra un único acusado, José Enrique Abuín Gey, el Chicle, y en la cual hoy se conocerá la conclusión de la autopsia, así como los informes complementarios. A su llegada a los juzgados, el abogado de los Quer, Ricardo Pérez Lama, ha anticipado que "todavía queda mucho que decir".

En la sesión de ayer, la versión de Abuín Gey siguió desmoronándose. El Chicle, tras ser detenido, llevó a la Guardia Civil al pozo de la nave de Asados donde había ocultado el cuerpo durante casi 500 días y, al bajar al sótano con el capitán de la UCO, se negó a acercarse a la arqueta. "No quiero ir, tengo grabada la cara de la niña", le dijo. Diana dejó, además, 123 wasaps en diez minutos para que los expertos pudieran seguir su rastro hasta el punto donde el Chicle la abordó al final del paseo del Areal de A Pobra, como sostienen las acusaciones, y no en la paralela y peor iluminada calle Venecia como dice Abuín, tal como demostraron ayer los especialistas de la Guardia Civil.