La lata de aluminio es el envase más reciclado en Europa con una tasa récord del 74,5%. Pero, a pesar de esta buena cifra, todavía quedan pasos importantes para avanzar hacia una tasa de reciclaje cercana al 100%. Una de las cuestiones fundamentales para alcanzar este objetivo pasa necesariamente por mejorar la infraestructura de reciclaje fuera de casa. Así lo cree también el 92,8% de los gallegos, que ve necesario que se mejoren los recursos para reciclar en las calles. De hecho, nueve de cada diez (91,6%) ciudadanos de la comunidad aseguran que efectivamente reciclarían más si hubiera más papeleras selectivas en los espacios públicos.

Estos datos se desprenden de la encuesta “Tenemos otro latido” realizada por Ball, el mayor fabricante mundial de latas de aluminio, donde se analizan las percepciones de los españoles sobre la sostenibilidad de los envases y los hábitos de reciclaje. El estudio también concluye que el 80,7% de los gallegos siente frustración cuando quiere reciclar envases en el entorno urbano y no ve papeleras selectivas para separar.

Cyrille Vecchi, manager de sostenibilidad de Ball para Europa del Sur explica: “La lata de aluminio, por sus características particulares, está muy unida al consumo en la calle y, debido a su alto valor, sería un error no recuperar todos esos envases para ponerlos de vuelta en la economía. Aunque en los últimos años se han hecho esfuerzos importantes para mejorar la infraestructura de reciclaje en lugares públicos, es preciso seguir avanzando en esta dirección con más papeleras para separar residuos, especialmente en los entornos de ocio y trabajo que es donde más bebidas se consumen”.

Precisamente, una de las imágenes más comunes en los sitios de mayor concurrencia como playas, parques o festivales es encontrar las papeleras de reciclaje, cuando las hay, llenas. En esta situación, lo que la mayoría de los gallegos suele hacer cuando quiere tirar un envase es llevárselo y esperar hasta que encuentra otro contenedor adecuado vacío para reciclarlo, como afirma un 61,4%. Un 24,1% lo tira en cualquier papelera que vea vacía en ese momento, aunque no sea el correspondiente para el reciclado, mientras que un 12% lo suele dejar en el suelo en la zona donde está la papelera llena (siendo este uno de los porcentajes más bajos del país).

Según revela la encuesta, el 84,3% de los consumidores gallegos considera muy importante que los envases sean respetuosos con el medio ambiente, lo cual refleja la creciente concienciación de la opinión pública en torno a la sostenibilidad y al reciclaje. Sin embargo, solo un 28,9% lleva esta consideración a rajatabla, y afirma que únicamente compra envases que sean respetuosos con el medio ambiente, siendo la comunidad autónoma que menos apuesta por este tipo de envases.

La sostenibilidad es una demanda social que a su vez está provocando que las compañías más innovadoras apuesten por envases como la lata de aluminio para todo tipo de categorías de bebida. En este sentido, ya hay un 47% de consumidores gallegos que elegiría la lata para consumir zumos, un 41% para consumir agua enlatada e incluso un 30,1% y un 10,8% para sidra y vino, respectivamente.

“Cada vez son más las empresas comprometidas con la sostenibilidad de los envases en los que comercializan sus bebidas y que encuentran en la lata de aluminio una solución óptima. La lata es la campeona del reciclaje, ya que se puede reciclar infinitas veces sin perder calidad y de forma sencilla, rápida y económica. Su ciclo de vida es un ejemplo perfecto de economía circular”, explica Vecchi.