La cara oculta de la Barcelona de 1960 y la llegada de la heroína a España, aderezadas con música de jazz, son algunos de los componentes de la serie de Netflix, "Hache", que se estrenará el día 1 de noviembre en 190 países de todo el mundo, interpretada por Adriana Ugarte, Eduardo Noriega y el gallego Javier Rey.

En una entrevista con Efe, la creadora del proyecto, Verónica Fernández, comenta que empezó a escribir el guión después de descubrir que cuando el capo de la mafia Lucky Luciano fue expulsado de Estados Unidos y se estableció en Italia siguió controlando la ruta de la heroína entre Asia y Norteamérica, introduciendo la droga en España a través del puerto de la capital catalana.

Aficionada al cine negro, perfiló a un personaje principal, Helena, una magnética mujer sin muchos escrúpulos, "un lobo sin conciencia de manada", en palabras de Ugarte, su trasunto, y, a partir de ahí, fueron creciendo otros protagonistas como Malpica (Javier Rey), jefe de una banda de la ciudad, con epicentro en el Club Albatros, y el torturado inspector Alejandro Vinuesa, interpretado por Eduardo Noriega.

"Yo soñé con una serie -proclama Fernández- y creo que el resultado es mucho mejor. Seguro que a los Reyes Magos les hubiera pedido menos, y que Netflix haya apostado por la historia, no se me ocurre lugar mejor para mostrarla".

La serie, dirigida por Jorge Torregrossa y Fernando Trullols, cuenta con ocho episodios, de 50 minutos de duración, y fue grabada el año pasado entre Barcelona, Manresa, Terrassa y Tarragona, con un elenco que se completa con Marc Martínez (Arístides), Ingrid Rubio (Celeste), Pep Ambròs (Senovilla), Toni Zenet (Larrocha) o Josep Julien (Eladio Pérez). Torregrossa ("Fariña" o "Velvet Colección") desvela que cuando le llegó el guión quedó abducido por los personajes, todos ellos unos supervivientes, y "por cómo eran de descarnados, por cómo estaban llenos de demonios, por cómo se relacionaban".

A su juicio, son gente a la que "el instinto de supervivencia les lleva a hacer cosas muy extremas".

Asimismo, destaca que lo que les irá sucediendo "está contado de una forma muy poco habitual, y yo he buscado que la serie fuera a nivel visual muy actual, con los actores con mucha libertad de movimientos. Es como estar metidos en un documental de la época de los sesenta".

Tanto Verónica Fernández, que antes había estado detrás de series como "Cuéntame" o "El Príncipe", como Jorge Torregrosa solo tienen buenas palabras con respecto a Netflix.

"Las escenas de sexo, la violencia que hay, la historia tal como la hemos querido contar está allí, y la culpa de que no guste la vamos a tener nosotros, nadie más", aseveran ambos.

Adriana Ugarte precisa que el punto de partida "ya fue muy bueno porque los guiones resultaban muy atractivos y muy profundos".