El momento de meterse en la cama es una liberación total. Nuestro cuerpo y nuestra mente se relajan, tras todas las tensiones del día a día. El acto de tumbarse en la cama y estirarse para, posteriormente, dormirse es de una relajación máxima. Esta sensación es mucho más intensa si lo hacemos desnudos. El hecho de despojarnos de toda nuestra ropa al irnos a dormir tiene numerosos beneficios para el cuerpo humano, según investigaciones científicas. A continuación, te desvelamos algunos de ellos.

Menos estrés

Al dormir desnudos se reduce la producción de cortisol, una hormona relacionada con el estrés. Por eso, si te decides a quitarte toda la ropa al meterte en la cama notarás cómo estás mucho más relajado dada la bajada de niveles de cortisol.

Activa el metabolismo

Diferentes estudios han demostrado que dormir en un ambiente más fresco permite que el cuerpo produzca más grasas saludables, las cuales queman las calorías para ayudar así a generar calor corporal. Por eso, al dormir más fresco el metabolismo es más efectivo y se activa más.

Beneficios en la salud

Hay ciertas partes de nuestro cuerpo que nunca o rara vez están al aire. La decisión de dormir desnudos nos ayuda a liberarnos de esas prendas siempre presentes (sobre todo ropa interior) y, además, nos ayuda a reducir el riesgo de ciertas enfermedades, por ejemplo, de la piel. Desnudarse a la hora de irse a dormir ayuda a reducir también el riesgo de padecer diabetes, mejora la circulación y reduce la presión arterial, factores que tienen una relación directa con el bienestar físico, desempeño y satisfacción sexual.

Mejora la fertilidad masculina

Un estudio del Instituto Nacional de Salud y Desarrollo Infantil de la Universidad de Stanford descubrió que los hombres que dormían desnudos en lugar de usar calzoncillos tenían un índice de ADN dañado en sus espermatozoides un 25% menor que los hombres que sí los usaban.

Mejores relaciones con tu pareja

Si tienes un compañero/a con quien compartir cama, dormir desnudo crea el escenario perfecto para un contacto piel con piel. Ya se sabe que el roce hace el cariño. El contacto cercano con un ser querido puede aumentar enormemente la cantidad de oxitocina, también conocida como la hormona del amor, en nuestro cerebro. Esta hormona es el neurotransmisor que nos ayuda a sentir esos buenos sentimientos hacia nuestra otra mitad. De manera que dormir desnudos nos ayudará a sentirnos mejor con nosotros mismos y con nuestra pareja.

Tendrás más sexo

Dormir de forma regular desnudos al lado de nuestra pareja, nos ayuda a ser más conscientes de nuestro cuerpo, cosa que aumenta nuestro potencial erótico y el deseo sexual. Las parejas que duermen desnudas tienen más frecuencia en sus relaciones sexuales y mayor satisfacción.