Tras un concierto pasado por agua, en el que tanto Moon Cresta como el grupo Aurora & The Betrayers tuvieron que ser reemplazados dentro del Museo do Mar, el ciclo musical de 'Solpores do Museo' recuperó su escenario original. La terraza del Museo do Mar volvió a estar repleta de público ansioso por escuchar a las estrellas musicales de la noche: Soleá Morente y Xosé Manuel Budiño.

Pocos días después de que se pusieran a la venta las invitaciones para asistir ya se habían agotado, lo que hacía presagiar un nuevo éxito de asistencia al que parece ser el concierto más ecléctico de todo el Solpores, por la disparidad de los artistas; lo cual no pareció defraudar a ninguno de los asistentes. Los invitados disfrutaron de las interpretaciones de ambos músicos desde las 20.30 h. y de una nueva puesta de sol sobre la ría.

La fusión del indie, el flamenco y el pop-rock definen el estilo de Soleá Morente, una artista que, pese a su apellido, no se deja definir por las raíces; de hecho, ella misma fue quien en su última visita a Ourense se autodefinió como "culo de mal asiento" en cuanto a seguir la corriente flamenca de los Morente.

Budiño disfrutó del estilo de la madrileño-granadina hasta que llegó el turno de presentar su nuevo álbum, "Fulgor". Una obra diferente, alejada de todo lo que había hecho previamente, y en la que no solo es compositor de la música, sino también vocalista de sus propias letras. "El gaitero de Moaña" dio la mejor versión de su renovada faceta acompañado de Brais Morán, a la guitarra y los coros, Fran Sanz al bajo y Ton Risco en la batería.

Un nuevo éxito del ciclo de conciertos de Solpores do Museo, al que ya solo le quedan dos citas: el jueves 22 de agosto con Joe Crepúsculo y Cora Velasco y, para terminar, el día 29 con las actuaciones de Zenet y Bliusvai.

El conselleiro de Cultura e Turismo, Román Rodríguez, destacó ayer el éxito de este proyecto.