David Fandila "El Fandi" fue el gran triunfador de la primera de la feria de la Peregrina al salir a hombros de la plaza pontevedresa tras cortar una oreja a cada toro, en una tarde aciaga para Pablo Aguado, que tuvo un mal lote, y en la que el rejoneador Diego Ventura volvió a ganarse al público, aunque solo obtuviese un trofeo ante el monumental enfado del tendido que abroncó al presidente.
El rejoneador Diego Ventura había dejado el listón el pasado año muy alto, esto sumado a encontrarse con un enemigo demasiado pesado para el rejoneo, 540 kilos, convirtió la lidia de su primer enemigo en un intento sin brillo dado de que Romeno el morlaco carecía del trapío suficiente para transmitir una faena de emoción que siempre busca el torero a caballo Portugués. No obstante, tiene tanta calidad el binomio montura - jinete que en determinados quiebros y requiebros consiguieron la ovación del respetable. Una débil petición de oreja en los tendidos acompañó la entrada del astado al deshollinadero.
Todo lo contrario en su segundo del lote. De nombre con reminiscencias Galaicas , Costureiro alcanzó la tarde sus momentos de mayor transmisión Diestro a caballo con los tendidos. Siempre a lomos de sus monturas que en todo momento guardándole la cara al toro, haciendo gala de una doma espectacular dejó momentos de tal intensidad que las ovaciones y los olés retumbaban en el coso de San Roque.
Tras recibir una negativa del presidente a colocar un último par de banderillas, acertó con un rejonazo mortal al que le siguió la muerte de su enemigo y las ovaciones del tendido.
Lo que pasó a continuación es lo que da nombre a esta crónica "Con él llegó el escandalo". No puede ser que la máxima autoridad del festejo adopte tal postura de negación a escuchar el clamor del respetable. Y es que hoy los gritos y silvidos dirigidos al "equipo de gobierno" de la plaza se debían escuchar a kilómetros de distancia. No hay derecho que Ventura no haya acompañado hoy a Fandila en su salida a hombros.
El triunfador
David Fandila "El Fandi" le quiere mucho a Pontevedra y la capital del Lérez le corresponde con un cariño y admiración que cada año se acrecienta. Todos sabemos que para los aficionados de San Roque la suerte de banderillas es muy apreciada y en esto Fandila es el rey. Cada año nos sorprende más y en esta última ocasión se ha sacado un violín acompañado de un par posterior que hace pensar que la cátedra de este hombre en esta suerte nunca tiene fin.
A mayores, si con la tela consigue faenas como la que nos brindó con Arbolito se entiende y se justifica que una vez más salga a hombros. eso sí antes de coger el albelro del ruedo y llevárselo al corazón en un gesto claro de intercomunicación con la afición de Pontevedra. Torero honesto donde los haya, David Fandila sería deseable que volviera el año próximo.
El que no tuvo suerte con su lote fue Pablo Aguado. Ni con Benemerito ni Regimiento (que fue sustituido por un sobrero) pudo mostrarnos esa esencia de torero que lleva dentro y que este año entusiasmó en La Maestranza y en Las Ventas del Espíritu Santo.
Aguado lo intentó, pero en su primero se encontró con un enemigo que daba unos arreones peligrosísimos que incluso de forma traicionera se defendía ante la suerte de su muerte. El maestro sevillano se descompuso ante la dificultad de deshacerse de su enemigo teniendo que utilizar el descabello en cuatro ocasiones y recibiendo un aviso.
En sus segundo sí vimos apuntes y destellos de la calidad del diestro, pero si no hay toro no hay faena y con la escasa ligazón de pases con su enemigo y una buena estocada no consiguió más que una fuerte ovación en su actuación de esta tarde.
En definitiva, entretenida la primera de feria de 2019 con un protagonista inesperado el presidente.
