La lluvia marcó la mañana de ayer del Sinsal SON Estrella Galicia 2019, aunque a partir de las tres de la tarde, dejó sitio a cielos despejados y un calor reconfortante, que hizo las delicias del público. The Venopian Solitude, banda de Malasia liderada por la enérgica Tahara Suiko, fue la encargada de abrir el cartel secreto de ayer. La antropóloga y cantante turca Gaye Su Akyol, la portuguesa Surma, los belgas STUFF, la banda brasileña Liniker e os Caramelows, los británicos Teleman y la estadounidense Michelle David and The Gospel Sessións completaron un cartel que recorre, como ya viene siendo norma "sinsal", buena parte del planeta. Esta vez fueron siete conciertos y siete países. Diversidad geográfica y de estilos para un cartel que para el público de hoy, último día del festival, no será sorpresa, ya que se repetirá íntegramente.

El segundo concierto fue el de Gaye Su Akyol, que legó a San Simón con su toque psicodélico y su segundo disco, "Istikrarl? Hayal Hakikattir" (Consistente Fantasía é Realidade), y su visión del rock turco, aliñado con sonidos de la cultura arabesca. La tercera propuesta fue Surma, desde Leiria (Portugal).

De los siete conciertos de ayer, cinco fueron proyectos liderados por mujeres artistas. Este es el caso de la banda de moda en Brasil Liniker e os Caramelows, que en 2016 llamó la atención fuera de Brasil con su primer disco, "Remonta" y que un año después triunfaron en Europa en el Primavera Sound 2017 con su mezcla de potentes temas en la búsqueda del baile.

Tras los conciertos de los STUFF, considerados los responsables de la nueva escena del jazz en Bélgica, y Teleman, el grupo pop británico que en 2018 puso música y color a una campaña de la marca sueca Ikea y que llegaron a San Simón con su disco "Family of Aliens", llegó la diva góspel Michelle David cn su banda. Si su misión era "gospelizar" a la audiencia, lo consiguió. Elegancia en un directo pleno de groove y que ya pudo cerse en Londres, Madrid, Berlín y París.

Además de los conciertos, se celebraron diversas actividades como las sesiones San Simón con el británico Aleksander Kolkowski.